La historia del deporte femenino y su inclusión en esta práctica continúa siendo un proceso lento. La mujer sigue luchando por su reconocimiento gracias a las masivas movilizaciones feministas y el esfuerzo por alcanzar la igualdad con el hombre. Solo obtienen un 1 % de patrocinios comerciales y el 5 % de la cobertura mediática. Por lo tanto, los adolescentes no consiguen modelos de conducta en la misma cantidad que las figuras masculinas que existen a día de hoy. La mayoría de los puestos de responsabilidad en las federaciones están ocupados por el género masculino y hacen falta medidas para la incorporación de la mujer.
Daniela Raya, estudiante del grado de Estudios Ingleses en la Universidad de La Laguna, y jugadora de la Asociación Deportiva Sanse, asegura que tiene que aguantar muchos comentarios y, sobre todo, actitudes machistas durante sus encuentros deportivos. En muchas ocasiones llegan a escuchar quejas directas acerca de su papel deportivo, en muchas otras son actitudes, como una mirada o una risa de burla. Además, declara que se enfrentan a una menor asistencia al campo de fútbol, lo que a veces también puede afectar un poco a su estado de ánimo. «Al tener menos visibilidad, el apoyo tanto económico como de la afición es más difícil de conseguir», afirma la jugadora gomera.
Raya Mesa concluye en que la situación estaba mejorando poco a poco, hasta que estos pensamientos son eclipsados por el auge repentino de ciertos partidos políticos que van en contra del feminismo. Por otro lado, cree que se está intentando combatir esta desigualdad pasando de las meras palabras a los hechos. Sin ir más lejos, numerosos partidos de fútbol femenino de la primera división española ocupan los grandes estadios nacionales este año con una increíble recepción por parte del público. De hecho, al partido disputado en el Wanda Metropolitano entre el Atlético de Madrid y el Fútbol Club Barcelona asistieron más de 60 000 espectadores, cifra que batió el récord mundial de asistencia a nivel de clubes.
Historia de la mujer en el deporte
En la época antigua de los Juegos Olímpicos, este terreno estaba completamente vetado para la mujer, no solo como deportistas sino como espectadoras. De hecho, el francés Pierre de Coubertin se opuso, en todo momento, a la participación femenina en estos juegos. En el año 1928, consiguieron su plaza en la competición con cerca de 300 participantes, casi un 10 % del total. También, se les permitió competir por primera vez en pruebas de atletismo, considerado el deporte rey. Según un documento elaborado por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, el número de mujeres inscritas en un deporte federado ha crecido un 35,4 % en los últimos años.
Nos encontramos con diferencias salariales. Por ejemplo, Álex Morgan, la jugadora de fútbol mejor pagada en el mundo, cobra 3 000 000 € anuales, en cambio Messi, llega a los 65 000 000 €. En waterpolo, las mujeres no llegan a los mil euros mensuales mientras que los chicos pueden llegar a los treinta mil euros al mes.
«La mujer se sigue enfrentando muchos obstáculos sobre todo en el ámbito profesional, aunque también en la vida en general», sentencia María Thelen. La estudiante de Turismo y jugadora del Club Voleibol Callejones garantiza que la situación de la mujer ha cambiado totalmente y ya es habitual ver un denso número de ellas que son deportistas y para nada son mal vistas o discriminadas en la sociedad. Sin embargo, la brecha salarial de género continúa siendo dispar entre ambos sexos.
Cobertura mediática insuficiente
En cuanto a la divulgación del deporte femenino por parte de los medios de comunicación, en una investigación que se llevó a cabo en 108 países, las mujeres aparecían en el 11 % de las noticias deportivas, mientras que los varones un 89 %. En otra investigación realizada por la Universidad Carlos III de Madrid, analizaron que las chicas solo aparecen en un 5 % de la prensa deportiva. Por el contrario, el hombre protagoniza un 92,2 % (el 5 % restante son noticias neutras).
Tibiabin Pérez, futbolista en la Unión Deportiva Tacuense y alumna del grado de Logopedia, opina que son cifras escandalosas, pero si lo comparamos con los datos de años atrás, está complementa segura que hay una evolución muy importante. Asimismo, considera que no hay suficiente cobertura mediática, pero si ha ido aumentando. El problema principal es que solo se hable del deporte rey actual, el fútbol. El mayor porcentaje de retransmisiones las abarca este deporte y no da lugar a los minoritarios.
La solución que las entrevistadas visibilizan es que se abarque la misma cantidad de partidos y carreras. Gran parte de la sociedad está reaccionando de manera positiva, y al final, depende de nosotros, como consumidores, que la prensa y la televisión lo promueva, pues van a publicar y retransmitir lo que la sociedad consuma. «Aun así, es evidente que también debe salir de los medios ese afán por informar, para reflejar a través de sus publicaciones el cambio que está teniendo lugar en nuestra sociedad», ultima una de ellas.