La Film Symphony Orchestra actuó ayer sábado, 1 de febrero, en el Auditorio Adán Martín de Santa Cruz de Tenerife. El recinto recibió con muchos aplausos al director, Constantino Martínez-Ortz, y a los músicos. Todas las bandas sonoras fueron introducidas con una sinopsis de cada película y con las nominaciones o premios que habían recibido. Martínez-Ortz jugó con el humor para empatizar con los espectadores y así hacer de las presentaciones un momento más ameno.
Abismo de pasión, de Erich W. Korngold, abrió el concierto, que continuó con El bueno, el malo y el feo, de Ennio Morricone, e Inteligencia artificial, de John Williams. Estas dos bandas sonoras contaron con la intervención de la soprano canaria Blanca Valido.
También se pudo disfrutar de distintos solos de algunos instrumentos como el acordeón y el piano en la banda sonora de Amelié. Además, los más pequeños pasaron un rato divertido con varios de los temas de Aladdin, de Alan Menken, y Cómo entrenar a tu dragón, de John Powell.
Después de hacer un descanso de 20 minutos, Martínez-Ortz planteó un concurso: ganar un viaje a Hollywood adivinando las canciones que tocarían en unos pocos segundos, lo que levantó gran expectación.
El público, que llenó el Auditorio, se puso en pie con las interpretaciones de Piratas del Caribe, de Klaus Badelt; Advengers: Endgame, de Alan Silvestri, e Interstellar, de Hans Zimmer. Una recopilación de las tres películas de Regreso al futuro puso fin al concierto.