El salón de actos de Farmacia de la Universidad de La Laguna acogió ayer miércoles, 4 de marzo, la charla Mitos y realidades del coronavirus. Impartida por Jacob Lorenzo, director del Instituto Universitario de Enfermedades Tropicales y Salud Pública de Canarias, el objetivo fue solventar todas las dudas acerca del Covid-19 y eliminar cualquier alarma generada por la presencia de este nuevo patógeno. Asistieron Susana Abdalá, decana de la Facultad, y Ernesto Pereda, vicerrector de Investigación.
Lorenzo aclaró que el coronavirus es una familia de virus del tipo zoonótico, es decir, que puede transmitirse de forma natural de los animales a los seres humanos. El foco de este brote se localizó por primera vez a principios de este año en Wuhan, una ciudad al sureste de China.
El ponente subrayó que el Covid-19 se propaga a través del contacto directo. Por ello, para evitar su esparcimiento, se recomienda lavarse bien las manos durante un minuto y taparse la boca con la parte delantera del codo cuando se esté tosiendo. El contagio de este virus, añadió, tiene diversas consecuencias, «que pueden ir desde enfermedades respitarorias comunes hasta patologías más graves como el Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SRAS)«. La sintomatología que presenta, destacó el director del Instituto, es la siguiente: «Tos, dificultad respiratoria, congestión nasal, fiebre y, en algunas personas, diarrea».
Jacob Lorenzo insistió en que el Covid-19 no es capaz de sobrevivir más de unas pocas horas en el ambiente, «por lo que no hay que temer recibir paquetería comercial procedente del país asiático, pues esta no se encuentra infectada». Respecto al uso de mascarillas en la población, hizo hincapié en que únicamente las necesitarían aquellos que padezcan el virus, para no infectar así a la gente de su entorno por contacto estrecho con las secreciones respiratorias. Asimismo, recalcó que no son cien por cien efectivas si no se acompaña de otras medidas preventivas.
Canarias todavía no registra contagios autóctonos
Hasta la fecha, todos los infectados por el Covid-19 en Canarias han sido pacientes procedentes de otros países, pues aún no se ha detectado ningún contagio autóctono. A su vez, el investigador puntualizó que más del 80 por ciento de los casos contabilizados en territorio nacional son leves y que el índice de mortalidad de este virus es pequeña, «ya que la mayoría de las personas de 80 años con patologías previas son las que estén en el 0’7 % del fallecimiento».
El experto explicó que, en la actualidad, España está en el nivel uno de alerta sanitaria, «lo que significa un escenario de contención que no contempla una transmisión comunitaria descontrolada, ni la entrada masiva de casos importados». Además, estimó que el contagio se reduciría en un 25 por ciento con el simple hecho de lavarse las manos y procurar no expandir las gotas a la hora de estornudar.
Por último, subrayó que «tenemos que evitar el miedo y la falta de confianza en nuestro personal autorizado» y afirmó que la existencia de una «pandemia de la desinformación perjudica la erradicación de esta nueva enfermedad».