La Asamblea de Apoyo a Migrantes de Tenerife lanzó este pasado sábado, 7 de agosto, un cuestionario que puede rellenar la gente que haya cooperado con la misma en los últimos meses, o que haya ofrecido algún tipo de ayuda a los colectivos migrantes. Con ello, se pretende realizar una recopilación de datos sobre las formas en que la población tinerfeña y no residente ha colaborado, y cómo lo sigue haciendo, para apoyar a la inmigración africana llegada en patera a la Isla. Las respuestas obtenidas se utilizarán, entre otros fines, para saber de qué manera es más conveniente contribuir a su causa y cómo continuar haciéndolo de cara al futuro.
El cuestionario consta de 40 preguntas, en su mayoría de respuesta múltiple, en las que se solicita información referente al tipo de ayuda brindada (económica, sanitaria, legal, etc.) y la implicación con la Asamblea u otras plataformas. También, respecto a las zonas de Tenerife en que cada persona se implicó, aunque las acciones con mayor resonancia mediática y social hayan acontecido en el Campamento de Las Raíces.
Durante la primera mitad de 2021, la cuestión migratoria se posicionó con contundencia en la opinión pública debido al bloqueo fronterizo, las muertes y desapariciones en el mar, el aumento del flujo migratorio y las condiciones de acogida en Canarias. Según Caminando Fronteras, amparándose en datos que publicó en un informe el pasado mes de julio, la situación actual es equiparable a la Crisis de los Cayucos de 2006, en la que se batieron récords de fallecimientos y personas desaparecidas.
Nacimiento de la Asamblea
En ese contexto se organizó la Asamblea de Apoyo a Migrantes de Tenerife, en febrero de 2021, con el fin de denunciar las políticas migratorias, tanto nacionales como internacionales. Pero, sobre todo, para cubrir las necesidades de la inmigración recién llegada, ya fueran cuestiones físicas y psicológicas como legales o administrativas. También, en gran medida, con la intención de darles herramientas para alzar la voz en favor de sus consignas.
De ese modo, quienes decidieron implicarse crearon una serie de comisiones en las que participar en función de su disponibilidad. Entre ellas se encuentran las de traducción, acción directa, salud, ocio, comidas o escuelita. En esta última, el voluntariado da clases de español atendiendo a las necesidades comunicativas más inmediatas, como realizar gestiones con la Policía o las administraciones.
A causa del impacto social y mediático de la cuestión migratoria y de las acciones que se sucedieron en señal de denuncia, la implicación ciudadana no solo se extendió por la Isla, sino que llegó a todo el Archipiélago e, incluso, aunque en menor medida, a la Península y al plano internacional. Así, las colaboraciones se realizaron y se siguen llevando a cabo de múltiples formas: a través de organizaciones o a título individual, telemática o presencialmente, directa o indirectamente, etc.
Por ello, y considerando la complicación de coordinar a un gran número de personas, la Asamblea pretende comenzar a trabajar a partir de los datos extraídos de sus primeros meses de andadura para optimizar la atención ofrecida y saber cuáles son los métodos más convenientes.