El borrador del nuevo Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) del Parque Nacional del Teide que presentó el Gobierno de Canarias el pasado mes de mayo ha despertado mucha polémica. El sentido principal de la modificación del actual PRUG es la regulación del acceso a coches particulares al Parque. Básicamente, se prohibirá la entrada en coche y se impulsará el uso de guaguas. Sin embargo, una de las medidas que más críticas ha recibido concierne a las actividades físicas y deportivas que se podrán realizar en el Teide, limitándolas de una manera exagerada en algunos casos.
Una de las disciplinas más afectadas es el trail running, un deporte en alza desde hace ya varios años y que aquí en Canarias hemos sabido aprovechar para atraer al turismo deportivo. Con las normas recogidas en este nuevo borrador, solo se podrá correr por pistas y se prohibirá el acceso a los senderos homologados. De este modo, deportistas que forman parte de importantes equipos e incluso de las selecciones canaria y española de trail running, verán truncados sus entrenamientos, teniendo que discurrir por otras localizaciones.
Las limitaciones que plantea este nuevo PRUG también afectará a pruebas tan importantes como la Tenerife Bluetrail, una de las pruebas reinas del trail running a nivel mundial. De esta manera, la distancia ultra no podría discurrir, como hasta ahora, por el Parque Nacional. Este hecho hará que el número de inscripciones disminuya. Podemos estar a las puertas de que la Tenerife Bluetrail desaparezca tal y como la conocemos.
«Estas medidas afectarán negativamente al turismo deportivo en Tenerife y Canarias»
Limitar de esta forma las actividades físicas en el Teide podría suponer un impacto muy grave para el turismo y para la economía de la Isla. Así piensa también el presidente de la Federación Canaria de Atletismo, Alberto Hernández, quien ha señalado que «estas medidas afectarán negativamente al turismo deportivo en Tenerife y Canarias».
Es una realidad que estos cambios se realizan buscando proteger y regular el uso que se hace del Parque Nacional del Teide, pero en este caso se está castigando al colectivo que, probablemente, más respete y haga un uso más adecuado del Parque. El borrador aún no se ha aprobado, por lo que estas medidas podrían modificarse antes de que el nuevo PGRU vea la luz.