Sarah Garnett es una joven cosplayer profesional en Canarias. El cosplay consiste en vestir un disfraz de un personaje de animación o relacionado con el mundo de la ficción, normalmente creado por la persona que lo luce. Es una de las pocas personas que percibe remuneración por su pasión. Participa con diseños propios en diferentes concursos y exhibiciones artísticas en diferentes islas del Archipiélago. Fue participante del jurado en el primer concurso de cosplayers en la Tenerife GG en julio de 2022 y concursante en otros numerosos eventos relacionados con el gaming en los que los trajes de animación están presentes.
¿En qué momento de su vida se inició en el mundo del ‘cosplay’? «Mi primer cosplay fue realmente en 2011. Siempre digo que empecé de forma seria en este campo artístico en 2013 porque es cuando empecé a tomármelo con más pasión y seriedad. Siempre he sido una niña friki. Veía anime tanto en la tele como por internet desde que era pequeña. Un día navegando por internet encontré una foto de una chica asiática con un traje de Miku Hatsune. Desde que lo vi supe que quería hacer lo mismo que ella».
Crea sus propios disfraces. ¿En qué series, personajes o mundos de fantasía se inspira a la hora de confeccionar tu traje? «La mayoría de los trajes que tengo son hechos por mí misma a lo largo de estos 10 años haciendo cosplay, aunque otros muchos son comprados por internet. Generalmente suelen ser de series o videojuegos que me interesan en el momento o voy descubriendo y me van enamorando».
¿Qué dos disfraces le han sorprendido más hasta el momento entre todo lo que ha visto? «Me impresionó muchísimo el cosplay que presentó KeltonFX en la Blizzcon de 2018, con un diseño propio de Symmetra, el personaje del videojuego Overwatch. Otro traje que adoro es el de la Princesa Peach de bruja, confeccionado por Kinpatsu y diseñado por Fonteart«.
¿Qué es lo que más le fascina de este mundo? «Me encanta la originalidad que cada participante le da a su traje. En el cosplay hay mil formas de llegar a un mismo resultado, y cada persona lo hace de forma diferente según el tiempo o los recursos que tiene. Eso hace que cada diseño sea único y especial para su quien lo viste, y eso me parece precioso».
Como profesional del cosplay. ¿Dedica su tiempo íntegramente a este trabajo o lo compaginas con algún otro? «Creo que en la actualidad sólo hay unas pocas personas en el mundo que puedan dedicarse únicamente al cosplay como forma de trabajo, y claramente no es mi caso. Sin embargo, gracias a algunos ayuntamientos que me han contratado para dar cursos de iniciación al cosplay, y gracias a algunos eventos que me han elegido como invitada cosplayer, he podido tanto trabajar de forma remunerada como viajar a distintas islas gracias al cosplay.
¿Cuál ha sido el diseño más complejo que ha realizado? «Seguramente si tuviera que elegir uno diría el traje de Azula del diseño de Hannah Alexander, que es un redesign de un personaje de Avatar. El traje combinaba tanto armadura, como confección de vestuario».
«Un ‘cosplay’ de Marvel o Disney nunca pasará de moda»
¿Le queda algún reto por alcanzar en tu vida profesional? ¿Qué otras disciplinas artísticas e gustaría descubrir? «En el mundo del cosplay me quedan muchos retos aún. Tengo muchas ganas de ponerle mimo a mi nuevo proyecto, y también a hacer algunos otros trajes que tengo pendientes desde hace tiempo. Me encantaría tener tiempo para hacer un cosplay de armadura por así decirlo, o también algún traje pomposo de princesa Disney con metros y metros de tela en la falda…».
¿Qué cosplays no pasan de moda y siguen demandando las nuevas generaciones? «Yo creo que cualquier cosplay de videojuegos como el League of Legends o el Kingdom Hearts siempre causan furor, independientemente del año en que se luzcan. Pasa lo mismo con los personajes de Disney o Marvel, y también con animes como Evangelion o Naruto«.
¿Realizada diseños por encargo? «No hago cosplays por encargo porque a pesar de llevar diez años en el mundillo, sé lo justo y necesario. No tengo estudios específicos de costura o confección. Coser para alguien que no soy yo o con mis medidas me cuesta bastante. Si alguien buscara a una persona que realice diseños, les recomendaría a ManuMarvel, que es una cosplayer de Gran Canaria que sí hace confecciones para otros cosplayers«.
¿Qué aspectos se valoran más cuando participas como jurado? ¿Un perfecto diseño, la creatividad, la originalidad, el esfuerzo empleado… alguna cosa que complemente a la otra…? «Cada concurso tiene unos parámetros distintos: en las pasarelas se valora más el traje en sí, mientras que en los concursos se valora también la actuación y el atrezzo. Acabado, fidelidad, caracterización, estilización de pelucas, props, actuación… son algunos de los aspectos que se suelen valorar en la mayoría de concursos».
¿Cree que existe algún diseño imposible a la hora de confeccionar un personaje? «Siempre que pienso que el diseño de un personaje es imposible o descabellado, aparece un cosplayer que lo trae a la vida a la perfección. Así que yo ya me creo cualquier cosa».
¿Cuántos diseños guarda actualmente en su colección? «En total hice unos cuarenta y cinco cosplays en mi vida, contando tanto los que he confeccionado yo como los que me he comprado prefabricados»
¿De cuáles nunca se desprendería? «Creo que uno de los que más cariño le tengo es el de Wadanohara, ya que fue uno de los primeros que cosí enteramente yo sola, y guarda un lugar especial en mi corazón por eso… El cosplay de Rapunzel también supuso un enorme reto para mí cuando lo hice, en 2018, tanto por la parte de costura como por la de la peluca. Es un traje al que siempre que puedo le cambio y añado detalles y cada vez que lo llevo tiene alguna cosita más que lo hace especial y diferente a la vez anterior».
¿Qué mensaje enviaría a las personas que te están leyendo en este momento? «Si quieren probar el cosplay, se animen. Es un hobby muy terapéutico que te va a dar montón de momentos felices y anécdotas graciosas. Es para todo tipo de personas de cualquier edad, y hay mil formas de llevarlo a cabo. Busca la que mejor se adapte a ti y disfruta».