Jorge Méndez Ramos, profesor Titular del Departamento de Física en la Universidad de la Laguna y coordinador del grupo de investigación Nanomateriales y Espectroscopía (NAMES), fue ayer el protagonista y representante de la ULL en este nuevo encuentro anual de la Pint of Science. Esta serie de ponencias, que comenzaron este lunes simultáneamente en el Espacio Cultural Aguere, Café 7 y en el Barbas Bar, pretenden alejar la ciencia de los entornos académicos y hacerla más amena e interesante para todos los tipos de públicos.
La ponencia presentada este martes, 16 de mayo, por el docente e investigador, estuvo centrada especialmente en el título que lleva su actual línea de investigación, NAMES. En resumen, se tratan los diferentes materiales necesarios para lograr una energía renovable avanzada en Canarias. Como ejemplo de ellas se encuentran las fotovoltaicas, fotocatálisis, fotosíntesis artificial y la generación de combustibles solares. Es decir, todo lo relacionado con la conversación y manipulación de la luz, que actualmente es la vía emergente para la mejora del almacenamiento artificial de energía solar.
Méndez resume con breves y claras palabras la didáctica de su ponencia, “vamos a hablar sobre los elementos que sirven para manipular la luz”. Con ello se refiere tanto a la luz que nos llega del sol, como a la que proviene de un láser, fabricada en los laboratorios. Todo ello con una intención: mejorar las energías renovables y lograr avances en la medicina.
Además del tema de la luz, Méndez se centra en la lucha contra el cambio climático, argumentando que la única forma de combatir contra ello es a través del aprovechamiento de las energías renovables. Asegura que la energía fotovoltaica del sol es una herramienta enorme y necesaria en esta lucha contra las emisiones de gases Co2, que son los principales causantes de la contaminación medioambiental.
Pero a pesar de que el sol sea un combustible necesario, no es el motor más poderoso energéticamente hablando. Explica que las plantas son la respuesta, gracias a ellas, el planeta lleva funcionando desde hace dos mil años. “Aprender de la naturaleza es la clave del progreso”, aseguró el investigador. Por ello, el proceso que llevan a cabo en el laboratorio de Física es realizar una especie de fotosíntesis como la que realizan las plantas, para así explotar y desarrollar esta energía solar limpia.