Verónica Díaz y Gregorio Alayón, docentes de la Facultad de Derecho de la Universidad de La Laguna (ULL), codirigen un nuevo proyecto titulado Tribunales de Ayer y de Hoy: una perspectiva histórico-jurídica como propuesta de aprendizaje invertido y colaborativo. Con la realización de esta idea se ha conseguido que el alumnado de primer año del Grado en Derecho acudan a Juzgados y Tribunales. Previo a este esfuerzo, solo era posible acceder a ellos dentro del marco de las prácticas externas del último curso de la carrera.
Este proyecto surge por diferentes puntos de vista según comenta la profesora Díaz. La principal idea era el intentar acercar al alumnado a la realidad que implica la profesión que están estudiando: «Es más fácil llegar al estudiantado si lo pueden ver en la práctica a dejarlo, simplemente, en los contenidos teóricos. Comenzó a plantearse hace dos años, pero se implantó por primera vez a principio de este curso.
Este proyecto es completamente voluntario para el alumnado y quienes asistieron tuvieron que realizar una prueba teórica en relación con los contenidos de las asignaturas que imparten los docentes: Historia del Derecho y Derecho Romano. Según explica el profesor Alayón, «quienes obtuvieron mejores calificaciones pudieron participar en esta prueba piloto del proyecto». Verónica Díaz añade que «tuvo muchísimo éxito, pues se inscribió más estudiantado de lo esperado. Participaron tanto del grupo de mañana como de tarde».
«Queremos combatir la tasa de abandono que tiene el Grado»
Según Díaz este proyecto persigue ciertos objetivos que pueden ayudar al alumnado en varios aspectos: el primero, desde un punto de vista pedagógico, se ha conseguido que, tanto las instituciones públicas como de derecho privado, se vieran reforzadas como parte de su proceso de aprendizaje, «observando su vigencia en la actualidad y aprendiendo de la praxis habitual en los Tribunales».
Otro objetivo, según explica Alayón, es que el alumnado entienda la importancia que poseen los asuntos que se tratan en los juzgados: «Para el juez puede ser un divorcio más a solucionar, pero para quienes están allí supone su divorcio. Que puede ser el gran problema de la vida de una persona».
Como último objetivo, dentro del sistema educativo evita que el estudiantado abandone. Los últimos registros, pertenecientes al curso 2020-2021, muestran que el 24,8 % del alumnado dejó el Grado de Derecho. «Nuestra idea es fomentar que aprendan, pero también queremos combatir la tasa de abandono que tiene la carrera», concluye Verónica Díaz.