El pasado viernes, 10 de mayo, David Rees asistió al Búho Club en San Cristóbal de La Laguna para dar su primer concierto en en el Archipiélago Canario. El evento comenzó a las 19.00 horas. Llegado el momento, entró en escena con la canción, El chico del ukelele, demostrando su versatilidad musical al tocar el piano y preparando el terreno para la velada de pop cautivadora en tierras laguneras. El artista malagueño de ascendencia británica anticipó un espectáculo más low de lo habitual, prometiendo una experiencia más íntima y cercana con su público.
El concierto prosiguió con Niágara, una canción que forma parte de su primer EP titulado Ojos y que estableció el tono sereno y emotivo al son del piano. Querido Yo fue el siguiente tema interpretado, acompañado de su guitarrista y dedicado a sí mismo porque «a veces necesitas sentirte en paz con tus decisiones». Rees rememoró el momento en el que optó por rechazar la oferta de una gran discográfica, lo que le hizo cuestionarse si había tomado la decisión correcta. No pudo dejar fuera de la lista a Girasol, que también la cantó. El punto culminante emocional llegó con MI PARTE, David Rees añadió: «Espero que no os identifiquéis con esta canción porque querría decir que lo habéis pasado mal».
El ritmo del evento se aceleró con Amor De Película y Videojuegos: (, dos piezas dinámicas que se encuentran dentro de su proyecto Culturama. El artista malagueño cautivó con Diamante, tema que pertenece a otro álbum, Amarillo. Lo fusionó en un mashup con canciones conocidas como Nochentera, Tití Me Preguntó, Zapatillas o Tusa, así como algunas más autóctonas como Vivo en un archipiélago o Salsa con reggaeton.
«Mi concierto más que un show es una experiencia»
David Rees sacó su ukelele e interpretó De Colores, envolviendo al público en una atmósfera de nostalgia y conexión emocional. El cantante aseguró: «Mi concierto más que un show es una experiencia». Acto seguido, entonó Corazón de Limón, animando a la audiencia a unirse al estribillo, y continuó con Match, un tema que pertenece al proyecto Vacaciones EP.
«Me estoy dando el lujo de hacer versiones que probablemente no se vayan a escuchar más», añadió un elemento sorpresa al sacar al escenario una ruleta con diferentes canciones. Decidió cantar un tema que aún no ha sido lanzado, y solicitó amablemente al público que no grabara. Le tocó volver a emocionar a la audiencia con Transparente y Ella y Él, poniendo los pelos de punta a todas las personas presentes. Pero el ritmo volvió a aumentar con otro mashup, esta vez uniendo las Bizarrap Session de Quevedo y Snow Tha Product.
Antes de despedirse, David Rees interpretó dos mil veinte, un tema que evoca las experiencias vividas durante la cuarentena. Haciendo un gesto de retirada, la sala entera se unió para cantar en unísono De ellos aprendí, en un intento de pedirle al cantante que no se fuera sin interpretar la canción, que cuenta con casi 500 millones de reproducciones entre Spotify y Youtube. Sin embargo, el artista de ascendencia británica regresó al escenario para sorprender a todas las personas presentes con Horóscopo. Al finalizar, comentó: «Estoy amando esta energía».
Rees ofreció dos opciones a elegir entre Me gusta un chico y 50 cosas sobre mí. La gente escogió la segunda alternativa. El artista expresó su aprecio al ver que tiene público de todas las edades: «Me gusta que las personas jóvenes y no tan jóvenes puedan disfrutar de mis canciones y mis letras». Además, preguntó: «¿Quién asistiría a un posible concierto de regreso en las islas?», toda la sala levantó la mano en señal de entusiasmo. Terminó complaciendo a la audiencia y cantó De ellos aprendí acompañado por todo el Búho Club. Y para acabar y despedirse por todo lo alto, cerca de las 21.00 horas, bajó las escaleras e interpretó Radio 2000 rodeado de sus fans.