El IV Curso de Especialista en Gestión Enoturística y Análisis Sensorial de Vinos, dividido en tres módulos, tiene un total de 22 horas teóricas presenciales y 28 online. La profesora María del Pilar Leal Londoño se encargó, el pasado viernes 16, de impartir la primera sesión a lo alumnos sobre consumo y producción de vino. En total, son 14 los inscritos, todos externos a la Universidad de La Laguna. El principal objetivo es desarrollar habilidades para crear experiencias en torno al producto enológico e incrementar el valor desde un punto de vista internacional.
Esta formación universitaria se centra en fomentar la cultura del vino y preparar a nuevos profesionales para el desarrollo económico y empresarial en este ámbito, así como sus relaciones con el turismo. Para ello, la ULL cuenta con el apoyo del Gobierno de Canarias; el Cabildo, a través de Turismo de Tenerife y su programa Saborea Tenerife; la Fundación Cajamar en Canarias; la colaboración de los once consejos reguladores de vinos del Archipiélago y el Ayuntamiento de Santa Úrsula.
La directora hizo especial hincapié en la “fabulosa tarea del Aula Cultural”, pues reconoció que “estamos presenciando un incremento del interés de los turistas en otro tipo de turismo, en este caso el relacionado con la enología”. Por ello, es fundamental que los canarios seamos “conscientes del enorme atractivo mundial que tiene el vino”.
«Hay que transmitir la cultura del vino a los más pequeños»
El vino tiene un valor incalculable para la docente. “No solo se trata de generar beneficios económicos sino hacerlo de manera sostenible, relacionado con la cultura y la tradición”. En esta línea, Leal Londoño afirmó que “reducir el vino solo a la bebida alcohólica sería malinterpretar y desconocer lo que significa”, pues considera que debe transmitirse a los niños desde que son pequeños.
La experta, conociendo la enorme tradición turística del Archipiélago, expresó que se necesita una mayor educación y formación enoturística y una adaptación por parte de los profesionales del vino. “Se deben tomar estrategias innovadoras en las bodegas para atraer turistas”, señaló la profesora.
Por su parte, el codirector del Aula Cultural de Enoturismo y Turismo Gastronónimo está orgulloso de que este curso vaya por su cuarta edición:“A pesar de ser una convocatoria anual, tiene muy buena aceptación. Esta vez hay un total de 80 alumnos entre los tres módulos”. Después de su primera clase, el curso finalizará el próximo 24 de marzo con la realización de un examen teórico y otro práctico.