Las piernas y los glúteos representan a dos de los músculos más grandes de nuestro cuerpo. Por lo tanto, para ejercitarlos en su totalidad es necesario trabajar con cargas mayores. Sin embargo, existen una serie de ejercicios básicos que no requieren de equipamiento. Si estos son combinados con movimientos, como el salto, aumenta la intensidad de la sesión. En caso de querer incrementar considerablemente en masa muscular, sí serían necesarias barras con discos, pesas, máquinas, etc. Siempre es recomendable realizar movilidad articular antes de comenzar.
Las repeticiones deben estar entre las 8 y 12, realizando 4 series de cada ejercicio. Debemos tener en cuenta que, en el caso de la zancada y relativos, estamos trabajando solo una extremidad y no las dos a la vez.
Las agujetas son el objetivo de cualquier gimnasia de intensidad. Estas nos indican una rotura del tejido, lo que significa que, con una buena alimentación y descanso, se regenerará más fuerte. Por otro lado, la técnica es muy importante. Las lesiones en las articulaciones son muy frecuentes, por lo que hay que extremar la atención.
El factor de mayor importancia es la dieta, no en el sentido de unas pautas fijas e inamovibles, por lo que debemos realizar una ingesta correcta de carbohidratos, proteínas y lípidos. Si no aportamos los nutrientes necesarios para que nuestro cuerpo se recupere, los efectos serán los contrarios a los esperados. Basta con interiorizar unas nociones básicas. De esta manera, son negativas todas las comidas ultraprocesadas después del entrenamiento, ya que es el momento en el que nuestro cuerpo absorbe más el sustento en cuestión.