Un grupo de investigadores de la Universidad Complutense de Madrid han colaborado en la creación de una herramienta que permite detectar agentes infecciosos arrastrados desde el norte del continente africano. El instrumento elaborado usa datos climáticos y biológicos para indicar el nivel existente de vectores perjudiciales. La prestigiosa revista científica PLOS ONE se ha encargado de difundir el trabajo, en el que también ha participado la Universidad de California.
El científico Eduardo Fernández Carrión declara que gracias a este innovador utensilio se puede conocer, de modo instantáneo, el riesgo de contagios víricos, mediante un avanzado sistema de alerta que percibe la dirección de los vientos. De esta manera, se notifica cuando las corrientes que entran a España desde África atraviesan una zona infectada.
El aparato permite localizar enfermedades propagadas por mosquitos
Por otra parte, el aparato resulta muy útil para localizar enfermedades propagadas por mosquitos, que afectan en especial a la fauna. Esto, según los expertos, puede ser de gran ayuda para los servicios epidemiológicos a la hora de poner freno a diversas patologías sufridas por animales, que podrían ser transmitidas a las personas.
Asimismo, el artilugio es capaz de simular los movimientos que llevan a cabo los Culicoides. De esta forma, existe la posibilidad de descubrir multitud de afecciones, que son muy dañinas para la salud, como por ejemplo, la peste equina africana, la fiebre del Nilo Occidental, o la fiebre del Valle del Rift.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) determina que los vectores causan el 17 % de las dolencias de tipo infeccioso. Igualmente, la corporación expone que son los insectos más peligrosos para el ser humano, ya que provocan más de 700 000 defunciones anuales, alrededor de todo el planeta.