Durante la pandemia del coronavirus se descubrió que el teletrabajo era un modelo no sólo necesario, sino una nueva fórmula de trabajo adaptable a circunstancias futuras. Durante 2021, según el portal con la mayor comunidad de teletrabajadores del Mundo, Nomad List, las Islas Canarias fueron el destino elegido por cincuenta mil remote workers para trabajar. Remote workers son aquellas personas que combinan la vida laboral con la comodidad de trabajar a distancia o desde el sofá de casa.
Ignacio Álvarez, jefe de Ingeniería de la compañía norteamericana Eventbrite, una plataforma digital organizadora de eventos en Silicon Valley, eligió Lanzarote para teletrabajar durante este verano. «El teletrabajo es flexibilidad. Es la oportunidad de organizar tu propio día a día. Equilibrio personal y laboral. El hecho de poder estar en un sitio paradisíaco como Lanzarote, poder ir a las playas, bucear los findes de semana y seguir desarrollando un puesto de trabajo que antes requería estar en una gran ciudad, para mi es el gran beneficio del teletrabajo», asegura.
Y es que cada vez son más los nómadas digitales que eligen las Canarias como destino para teletrabajar. Los mercados europeos que más apuestan por ellas son Reino Unido con un 33 %, Francia con un 15 %, Alemania con un 14 % e Italia con 7 %. Además, se prevé un crecimiento del 90 % de este segmento turístico en 2023. Las Islas deben reforzar la estrategia para atraer más trabajadores y abrir nuevas vías económicas para el Archipiélago.
«Se deben crear nuevas oportunidades para las Islas y posicionar así al Archipiélago dentro del mapa del teletrabajo mundial»
Durante la pandemia convulsionó el sector turístico en Canarias paralizándolo hasta llegar al cero absoluto. Canarias siempre ha sido un territorio que vive y depende económicamente de un único sector, el turístico. Un territorio con tantas posibilidades no puede depender de manera exclusiva de una única actividad económica. Si ese pilar cae se desmorona el resto. El sector del remote work debe ganar terreno como nueva fórmula de trabajo y apostar para que el destino siga consolidándose, no solo para vacaciones.
Cada vez son más las islas que, con visión de futuro, cuentan con espacios destinados para uso exclusivo del teletrabajo. Son los denominados espacios de coworking, como el Vivero de Empresas de Lanzarote perteneciente a la Cámara de Comercio de Lanzarote. Estos espacios de trabajo cuentan con conexión a Internet de alta velocidad simétrica, workcafé y salas de eventos. Son muchos los alojamientos que han adaptado sus instalaciones para facilitar el teletrabajo a los remote workers.
En definitiva, se deben crear nuevas oportunidades para las Islas y posicionar así al Archipiélago dentro del mapa del teletrabajo mundial. Existe una tendencia clara y hay que sacarle partido. Reforzar la estrategia para atraer a más trabajadores. Como quién coge olas y aprovecha el impulso de la corriente para continuar hacia delante.
Combinar el trabajo en remoto con el turismo sostenible y el emprendimiento sería lo ideal para el futuro sustento de Canarias. Calidad de vida y productividad pueden ir de la mano.