El fisquito Neurociencia y Topología tuvo lugar ayer jueves, 12 de abril, a las 10.45 horas. El evento, integrado dentro de la sexta temporada de Un Fisquito de Matemáticas, se celebró en el Aula Magna de la Sección de Física y Matemáticas. La ponencia fue impartida por Josué Remedio Gómez, profesor de Geometría y Topológica de la Universidad de La Laguna. En los diez minutos que duró la intervención, el objetivo principal fue dar a conocer algunas de las aplicaciones de la topología algebraica en la neurociencia.
Remedio Gómez explicó que uno de estos usos es el estudio de la estructura del conectoma del cerebro humano. Es decir, la investigación del mapa de las conexiones de la células de esta región. Además, añadió que la materia gris de este órgano está formada por núcleos neuronales, mientras que la materia blanca es una red de fibras nerviosas que conectan esos centros. “En un cerebro hay aproximadamente 86 mil millones de neuronas, lo que significa que escribir punto a punto toda la red neuronal es inabarcable para los investigadores”, agregó.
El profesor afirmó que cuando se trata de un ser vivo más sencillo como, por ejemplo un gusano, no es tan trabajoso. Aún así, realizar un mapa de su sistema puede significar un proceso de más de diez años. El ponente expuso que la teoría de grafos fue fundamental para el desarrollo de la neurociencia y permitió obtener muchos resultados. Un grafo consiste en elegir una serie de vértices, que son los objetos a estudiar, y una sucesión de segmentos que codificarán la relación entre ambos. Es decir, es la representación simbólica de los elementos que constituyen un conjunto mediante esquemas gráficos.
«La debilidad de uno de los períodos podría estar relacionado con la esquizofrenia”
El fisquitero expresó que los recientes avances en el campo de la imagen a través de resonancias magnéticas han permitido que se disponga de un gran volumen de información. Esto ha hecho que se descubran varios errores en la teoría antes mencionada. Gracias a la topología algebraica y a las herramientas como los grupos de homología, se pueden corregir esos fallos.
Remedio manifestó que los investigadores han comprobado que los seres humanos tenemos una serie de lazos que unen las regiones corticales y subcorticales, ambas parte de la corteza cerebral, que poseen relevancia a la hora de controlar ciertas funciones del órgano. Por último, comentó que “algunos de los ciclos neuronales podrían servir como biomarcadores para distinguir entre conexiones de las neuronas sanas y dañadas, o incluso que la debilidad de uno de los períodos podría estar relacionado con la esquizofrenia”.