Se hizo de rogar, pero llegó. La noche de ayer sábado 22 de julio, el puertorriqueño Luis Alfonso Rodríguez López-Cepero, más conocido como Luis Fonsi, encendió las luces del escenario e hizo rugir de emoción a todo el público chicharrero que, tras casi 40 minutos de espera, recibió al artista con ansias, pasión y mucha ilusión. Todos los que acudieron al concierto disfrutaron de dos horas de música ininterrumpida, en la que el solista despertó los sentimientos del público con temas muy emotivos, pero también con canciones que hicieron vibrar el estacionamiento del Parque Marítimo de la capital tinerfeña.
A las 21.40 horas el cantante subió al escenario cinco años después de su última visita a Tenerife, para presentar su gira mundial: Love + Dance World Tour. Acompañado por su banda y cuerpo de baile, convirtió el concierto en un show histórico para los miles de fans entregados a su música.
Comenzó la cuenta atrás, móvil en mano y escenario en silencio. Arrancó a ritmo de Tanto para nada. La multitud, agitada, gritaba y saltaba de emoción. Dos grandes pantallas a ambos lados del escenario mostraban al cantante y a todo su equipo para aquellos menos privilegiados que se encontraban alejados de la escena. Luis Fonsi apareció con una camisa blanca, pantalones vaqueros y una chaqueta con brillantinas deslumbrante que solo tuvo durante la primera canción. ¡Uau!
El concierto prosiguió con Corazón en la maleta, del álbum 8 lanzado al mercado en mayo de 2014. A continuación, puso en relevancia su faceta como baladista: música lenta, manos a los hombros unos con otros y Nada es para siempre, seguida de Imagíname sin ti. Apretaditos…
“Llevo cinco años esperando decir esto: ¡¡Buenas noches, Tenerife!!”. Y Luis Fonsi encendió. “Hoy voy cantar varios de mis éxitos, desde Imagíname sin ti, primera canción que canté aquí en esta tierra, hasta lo más nuevo”, dijo antes de que arrancase de nuevo. Luego, siguió Gritar, de su séptimo álbum (Tierra firme), y Llegaste tú, que dedicó a su hija Micaela. Por una mujer sonó con mucho ritmo. Y cantamos al unísono…
Despacito
Tras una breve pausa con batería, guitarra y bajo, llegó el éxito del verano, la canción más escuchada de todos los tiempos, con récords de industria, siendo número uno en 89 países y con cuatro mil millones de reproducciones: Despacito sonó y enamoró y cautivó. Para la ocasión Luis Fonsi lució nuevo vestuario.
Después de varias temas, le tocó el turno a sus grandes éxitos, como Quisiera poder olvidarme de ti, Qué quieres de mí, Abrazar la vida, Aunque estés con él y Respira. La noche no tenía fin y el artista hizo otro repaso con canciones más animadas, unas propias y otras que tomó prestadas. Sonaron La mentira, Don’t let me Down (The Chainsmokers), Without you (David Guetta con Usher), No te cambio por ninguna (tema propio) y Shut Up and Dance (Walk the Moon).
Fonsi continuó su concierto y con No me doy por vencido parecía que finalizaba el concierto. Se apagaron las luces del escenario durante dos minutos hasta que, de nuevo, irrumpió la música. El puertorriqueño, ahora, con la camisa del Club Deportivo Tenerife, cantó una de las melodías más emotivas de su trayectoria: Aquí estoy yo. Móviles al aire iluminados, solo batería, micrófono al público… Magia.
Y con el 10 de Suso Santana a la espalda, Luis Fonsi se fue… ¡Riqui raca!
