La comunidad universitaria cuenta con una sala de cardio y fitness desde hace muchos años. En la actualidad, están inscritos 110 alumnos para el ejercicio y disfrute de sus instalaciones. Estos pueden acudir los lunes, miércoles y viernes de 11.30 a 13.00 y de lunes a viernes de 18.00 a 22.00 horas. Por dicha prestación deberán pagar 38 euros de forma trimestral.
El gimnasio cuenta con una auxiliar técnica en animación físico-deportiva que se encarga de controlar los accesos y de que los usuarios vayan con la vestimenta y el calzado adecuado. El objetivo es controlar que se cumplan unas normas de prevención de riesgos, además del correcto funcionamiento del centro.
Hasta el curso pasado también contaban con un monitor que se encargaba de impartir la actividad durante una hora, tres veces en semana. Sin embargo, el Servicio de Deportes de la ULL detectó que era mejor ampliar el horario y darle a la sala un uso más libre. Es por ello que este año han eliminado el entrenamiento coordinado por el instructor.
El criterio de selección se establece a través de una selección de personal en función del currículum que se presente. Se escoge a los mejores candidatos y los citan para una entrevista en la que les hacen preguntas tanto teóricas como técnicas y valoran, asimismo, la actitud.
Elvira Hidalgo Rodríguez, técnica superior de deportes y responsable del área de actividades de la ULL, asegura a PERIODISMO ULL que se tiene en cuenta la «igualdad» en la contratación, debido a que es un sector muy masculinizado. Se intenta buscar el equilibrio, ya que “hay un estereotipo de género y se cree que el que orienta tiene que ser un hombre cachas y guapo”, afirma Hidalgo Rodríguez.
«Ir al gimnasio de la Universidad es una buena forma de conocer a otros alumnos e integrarse»
La sala de fitness y cardio tiene unas dimensiones bastante reducidas. Luis Manuel López López, alumno de cuarto de Periodismo, afirma que este es «uno de los aspectos negativos que afecta a personas con movilidad reducida». No obstante, lleva dos años ejercitándose en el gimnasio de la ULL gracias a «su bajo precio y la cercanía del mismo». Además, destaca la ayuda del auxiliar, que te da las «pautas necesarias para hacer bien los ejercicios».
Asimismo, dos alumnas Erasmus procedentes de Italia, aseveran que «ir al gimnasio de la Universidad es una buena forma de conocer a otros alumnos e integrarse». Por otro lado, consideran que «el precio es asequible» y, «aunque es un poco pequeño», les gusta.
La técnica superior de deportes afirma que antes contaban con una sala más. Esta se utilizaba para ejercicios libres, es decir, sin uso de máquinas como, por ejemplo, press de banca. Sin embargo, han tenido que dejar de contar con ese espacio porque era necesario para hacer los aseos.
También han tenido que reducir la sala de artes marciales, ya que la estación de guaguas del Padre Anchieta necesitaba la extensión. A cambio, el Cabildo de Tenerife ha prometido crear una nueva infraestructura justo en frente y, cuando finalicen las respectivas obras, ambas áreas de entrenamiento serán trasladadas al mismo.
Además, a pesar de que el plazo de inscripción todavía se encuentra abierto, las vacantes para la actividad ya están completas. Esto supone que los nuevos solicitantes entrarían en la lista de espera. El 8 de enero se abrirá una segunda tanda para el siguiente periodo, que corresponde al segundo cuatrimestre de la Universidad de La Laguna.
