La Romería de la Bajada de la Virgen del Socorro es una celebración de carácter popular que se celebra en el mes de septiembre durante los días 7 y 8 en el municipio de Güímar. La Bajada fue declarada, además, Fiesta de Interés Turístico Regional y reconocida como la romería más antigua en Canarias, con más de 150 años a sus espaldas. La celebración religiosa consiste en un recorrido multitudinario desde el centro del pueblo, hasta la zona costera de el Socorro. Tras esto, se procede a realizar una ceremonia cerca de la playa.
Con la Pandemia, la reconocida celebración se detuvo por medidas sanitarias y ciudadanas. Gustavo Pérez, primer alcalde de Güímar, este año vive las fiestas con especial emoción ya que, esta será su primera vez recorriendo la ancestral tradición como mandatario. «La Bajada del Socorro es un motor de movimiento, unas fiesta de encuentro. El objetivo del ayuntamiento es cuidar a aquellas personas que hacen estas fiestas de la gente», declara Pérez.
Por su parte, la concejala de Fiestas, Patricia Encinoso, reconoce que recibe este año la romería con «muchas ganas». Encinoso quiso recordar la importancia que tiene este festejo para la economía del municipio: «¡Todas y cada una de las fiestas generan economía! Con unas fiestas de esta envergadura, se multiplican los beneficios para la ciudadanía».
María Luisa Campos, concejala de las áreas de Cultura e Identidad Canaria, siente la romería como un auténtico encuentro familiar en el que la ilusión y la emoción van de la mano. «Nuestra Bajada se transforma con el paso de los años, la carroza más antigua era la de mi familia. Debemos agradecer nuestro patrimonio cultural», apunta Campos.
La reconstrucción de la ermita del Socorro
El conocido Caserío del Socorro, donde descansa la virgen durante la romería, consta de dos ermitas. Una de ellas se puede observar en la plaza principal y la otra está cercana a la costa de la playa de Chimisay. Ambos templos suponen un patrimonio arquitectónico de más de cinco siglos de longevidad. En los escritos de Fray Alonso de Espinosa, datadas en el siglo XVI, construyó la primera ermita para proteger la imagen.
A partir del año 1600 comenzaron las primeras restauraciones de los templos, hasta hoy en día. En la actualidad el ayuntamiento de Güímar y la comunidad vecinal del Socorro buscan poder recaudar seiscientos mil euros para restaurar el techo de la Iglesia. Pedro José Pérez, párroco de Güímar, comenta la necesidad de arreglar el techo y solventar los problemas detectados por el equipo técnico del Ayuntamiento.
El Cabildo de Tenerife se compromete a ceder trescientos mil euros, el Ayuntamiento de Güímar dará en el presupuesto ciento cincuenta mil y el resto debe obtenerlo la Diócesis de Tenerife. Con el fin de recaudar esa cantidad la Parroquia realiza una serie de iniciativas entre las que destaca la venta de chapas con la imagen de la Virgen.