La Universidad de Sevilla fue una de las seleccionadas para recibir financiación por parte del Consejo Europeo de Investigación, también conocido como ERC (European Research Council). Solo 18 entidades españolas han podido conseguir el dinero por parte de esta organización. La entidad ha dado ayudas a 269 investigadores y son alrededor de 2167 proyectos de investigación que aspiran a ser financiados. Este órgano tiene como finalidad buscar y financiar a largo plazo aquellos proyectos excelentes.
El fin principal es la realización de una indagación novedosa y potencialmente muy rentable, pero de alto riesgo. ERC, se divide en cuatro subvenciones: Advanced Grants (AdG), Consolidator Grant (CoG), Proof of Concept (PoC), Synergy Grants (SyG), Starting Grants (StG). El primero es el más alto de los cuatros niveles. Esta subdivisión consiste en ayudas destinadas a investigadores principales y consolidados que cuenten con logros significativos en su campo durante los últimos diez años. Su lema es reforzar la excelencia, el dinamismo y la creatividad de la investigación europea.
Los dos estudiosos, que han sido premiados con esta subvención son los científicos Eduardo Fernández Camacho y Aníbal Ollero. El primero quieren tratar de integrar sensores móviles colocados en vehículos terrestres. El proyecto plantea el estudio de una planta de energía solar, pero se podría aplicar a otros sistemas como el control de tráfico de ciudades, la gestión energética de edificios, etc. El segundo investigador intenta superar las limitaciones de los robots manipuladores aéreos en lo que respecta al tiempo de vuelo y la seguridad en la interacción con las personas. Los robots aéreos que se desarrollarán serán capaces de planear, batir las alas, posarse de forma muy precisa y manipular con otras extremidades.