El grupo Libertad Estudiantil es una de las tres candidaturas a las elecciones claustrales de la Universidad de La Laguna del próximo 2 de diciembre. Su portavoz, Brian Trujillo, junto a Aarón Mesa, Melany Pérez y Cristhian Expósito exponen y explican varios puntos de su programa, y comentan cuál es la postura ante los hechos recientes acaecidos en la Institución: la ocupación del Rectorado, el paso atrás del Gobierno de Canarias sobre la bonificación de la segunda y sucesivas matrículas y el papel del Consejo de Estudiantes.
En el programa de Libertad Estudiantil se habla de conseguir la igualdad real. ¿A qué se refieren? Aarón Mesa: «En el ámbito universitario debe haber igualdad efectiva entre toda la comunidad. No entendemos ni creemos que sea tolerable que haya discursos de odio dentro de una Institución pública, ni que se atente contra derechos fundamentales como la libertad a amar y la libertad de sentirse como cada cual quiera sentirse. Por ello condenamos todos los actos de este tipo que se hayan producido dentro de la Universidad, que ha pasado también con docentes, para que no vuelvan a repetirse».
También defienden la libre elección en el modelo de asistencia. Es uno de los puntos fuertes de su Programa Covid. ¿Qué esperan conseguir con esta medida? Melany Pérez: «El Programa Covid incluye la flexibilidad horaria porque muchos compañeros viven bastante lejos y no han visto positivo buscar piso cerca por la situación actual que vivimos. Por esto, creemos que se deben crear horarios asequibles por la situación de pandemia. Se le debe dar más margen al alumnado para que se pueda adaptar y pueda conciliar la vida estudiantil y personal dentro de unas circunstancias que no tienen por qué ser las deseables en el estudio y la familia. Por ello creemos que se debe permitir la elección del modelo de asistencia».
¿Cómo valoran el trabajo del Equipo Rectoral durante la pandemia? Brian Trujillo: «La Universidad ha puesto todos sus esfuerzos para adaptar la enseñanza, siempre presencial hasta ahora, a una docencia virtual. Si es cierto que creemos que las cosas se podrían haber hecho muchísimo mejor. No entendemos que se haya puesto un horario y una aplicación de reserva para la biblioteca de forma homogénea para toda la Universidad. El alumnado de Medicina, por ejemplo, sufre una pérdida del turno de biblioteca de media hora, porque sale de clase treinta minutos más tarde. Las cosas se podrían hacer mejor persiguiendo una adaptabilidad por grado y facultad».
«El Consejo de Estudiantes debió condenar el vandalismo contra nuestra sede»
¿Qué opinan de la labor del Consejo de Estudiantes desde su creación? Brian Trujillo: «El Consejo estaba empezando a caminar cuando llegó la cuarentena. Le pilló apenas un mes más tarde de su constitución y le faltó ese pequeño empujón. Ya en la pandemia le llegaban quejas y encontraba dificultades para gestionar los problemas que le sobrevenían desde el sector estudiantil. El alumnado se sintió por tanto un poco perdido también en este ambiente de incertidumbre. También es verdad que el Consejo de Estudiantes debe ser un órgano de representación de todos los estudiantes y no solo de una parte. Nosotros hace dos o tres semanas sufrimos ataques en el despacho y el Consejo no lo condenó. Entendemos que el máximo órgano de representación estudiantil tiene que pronunciarse ante ataques y vulneraciones de las sensibilidades existentes en la Universidad».
En su programa hablan de adaptar las guías docentes al mercado europeo. ¿Pueden poner algún ejemplo de guía a actualizar y por qué? Cristhian Expósito: «En mi caso, en el grado de Estudios Clásicos, llevamos unos tres cursos académicos intentando que el Gobierno de Canarias acepte un nuevo plan de estudios. El problema reside en que el actual tiene asignaturas de relleno que están para intentar compatibilizarse con otro tipo de grados, por si el alumnado que decide dejar la carrera pueda convalidar esas asignatura en su nuevo grado. El problema es que cuando llegamos a cuarto tenemos un déficit en gramática que no existiría si hubieran intensificado las horas y las asignaturas relacionadas con los Estudios Clásicos como tal. Por otra parte, queremos hacer prácticas reales».
«Las pruebas online son la mayor garantía para la buena salud de la comunidad universitaria»
Solicitan que los exámenes sean online durante la excepcionalidad de la Covid. ¿Cuál es la razón que sostiene este punto del programa? Melany Pérez: «Desplazarse a la Universidad implica aglomeraciones. Se depende por tanto de un espacio más amplio. Hacer exámenes presenciales implicaría poner en riesgo la salud del alumnado y sus familias, por lo que hacer las pruebas online son la mayor garantía para la buena salud de la comunidad universitaria». Brian Trujillo: «Desde el 2018 hemos apostado por la continua real liberatoria. Permitiría que haya personas que no tendrían que desplazarse por haber aprobado previamente la asignatura por continua. Si las guías docentes incluyeran la continua real liberatoria se podría cumplir con los aforos adecuados».
Durante el confinamiento se observó a docentes que no quisieron adaptarse a la docencia virtual. Ante esto, ¿qué creen que debería haber hecho el Equipo Rectoral? Melany Pérez: «Debería haber tomado medidas. Hubo docentes que no estuvieron por la labor, subían los PDF y no dieron clases online ni respondieron dudas. Creo que la Universidad debería haber tomado cartas en el asunto. El profesorado no salió perjudicado y nosotros claramente, sí». Brian Trujillo: «La Universidad tenía la responsabilidad de enseñar y adaptar a su profesorado. Su labor no fue evaluada realmente y creo que deberían haber sido sancionados quienes evitaron sus obligaciones docentes».
«Compartimos las reivindicaciones de quienes ocuparon el Rectorado, pero no las formas»
¿Qué opinan de la ocupación del Rectorado? Brian Trujillo: «Somos claros. Condenamos las formas de la ocupación. El Rectorado es un espacio universitario que pertenece a toda la comunidad universitaria, no solo a ese grupo que se dice representante del alumnado, pero sin serlo, pues no han sido elegidos para ello. Sin embargo, es verdad que compartimos su reivindicación de que se bonifiquen las segundas y sucesivas matrículas, tal y como se comprometió el Ejecutivo autonómico. Nosotros en su momento advertimos que la Consejería de Educación podía estar en aras de no cumplir sus compromisos. El Gobierno de Canarias se ha alejado del estudiantado y debe cumplir sus compromisos y la Universidad de La Laguna debe tener una actitud más proactiva para cumplir las necesidades de sus estudiantes».
¿Sufre la ULL una campaña de desprestigio? Brian Trujillo: «La campaña de desprestigio está relacionada con lo que sucede en la Universidad. Si todo fuera bien, el estudiantado no tendría que hacer ciertas cosas para que se le escuchara. No estoy justificando lo que ha hecho el grupo de estudiantes que ocupó el Rectorado, pero si puedo llegar a entender algunas de sus reivindicaciones. Es un toque a la Universidad para que esté más cerca del sector estudiantil. Deben contar con sus veinte mil estudiantes para tomar cualquier tipo de decisión. Igualmente, desde aquí me gustaría incitar también a la reflexión al alumnado para que las campañas que se realicen sean siempre ajenas a la mentira, para que no afecten directamente a nuestro título por una mala imagen de la Institución. Debemos hacer que esta casa sea mas abierta y tolerante».