“Podemos modificar el genoma de una forma impensable hace 4 años”

Ciencias de la Salud

Lluís Montoliu, investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en el Departamento de Biología Celular y Molecular, recibe a PERIODISMO ULL para hacer un repaso de la situación actual que existe en el mundo científico, en concreto de la edición genética, y de los trabajos que está llevando a cabo en su laboratorio. Además, el también miembro del CIBER-ER (Comité de Dirección del Centro de Investigación Biomédica en Red en Enfermedades Raras) trata diversos temas que conllevan cierta polémica en nuestra sociedad, como la experimentación con animales o las terapias alternativas.

¿Qué proyectos desarrollan en la actualidad? “Nosotros trabajamos en enfermedades raras, aquellas que afectan a menos de 1 de cada 2000 personas. Nuestro estudio se centra en el albinismo, que no solo produce una falta de pigmentación, sino también una visión muy limitada. Esta discapacidad visual es la que investigamos en el laboratorio y lo hacemos con animales, en este caso ratones, editados genéticamente con las últimas herramientas. Una de ellas es el CRISPR (Clustered Regulary Interspaced Short Palindromic Repeats). Con ella, lo que conseguimos es generar modelos de los diferentes tipos de albinismo para averiguar cómo se establece esta pérdida de visión y para ver qué es lo que se puede hacer para corregirla”.

¿Podría explicarnos qué es el CRISPR? “Es una herramienta de edición genética que hemos descubierto de las bacterias y nos permite modificar el genoma de plantas y animales de una manera que no podíamos ni imaginar hace apenas 4 años. Nos deja hacerlo con una precisión y una exactitud que no habíamos dispuesto. Con este sistema podemos alterar prácticamente cualquier gen, introducir mutaciones, revertirlas, etc. Y también nos va a facilitar la reproducción de cambios genéticos positivos de una variedad animal o vegetal en otra de la misma especie”.

«Seguimos invirtiendo poco y mal en ciencia, estamos muy alejados de la media europea»


¿Es España impulsor de la ingeniería genética? “Nuestro país tiene su contribución especial en la ciencia en todos los campos. Tenemos investigadores que están haciendo un trabajo excelente. Evidentemente, aquí nos cuesta un poco más que a nuestros colegas europeos porque no tenemos el apoyo con el que cuentan ellos por parte de las instituciones. Seguimos invirtiendo poco y mal en ciencia, estamos muy alejados de la media europea y, a pesar de tener increíbles profesionales, no estamos extrayendo todo el beneficio que podemos sacar de ellos”.

¿Qué opinión tiene de la inversión del Estado en I+D+i? “Es netamente mejorable. Además, es insuficiente. No podemos estar contentos cuando estamos a la mitad de lo que invierten los países de nuestro entorno. Desde que empezó la crisis hemos perdido el nivel de inversión y España ha retrocedido mucho. Creo que el mensaje que debemos trasladar es que hay vecinos europeos que, cuando han entrado en periodos de dificultad económica, en vez de reducir el presupuesto, lo han aumentado, ya que les ayudaría a salir de esta etapa dificultosa”.

¿Qué diría a todos aquellos movimientos que pretenden eliminar la experimentación con animales? “Cada uno puede pensar lo que considere oportuno, pero aquí lo que nos falta es información. En estos momentos no podemos prescindir de los animales, ya que siguen siendo necesarios a la hora de validar la eficacia y seguridad de medicamentos o terapias antes de que puedan trasladarse a las personas. Cometeríamos una gravísima irresponsabilidad si nos saltáramos el paso de experimentación animal. Los investigadores somos los primeros que desearíamos no utilizarlos si no fuera estrictamente necesario. Su utilización en Europa está muy regulada y antes de obtener los permisos, hay que justificarlos muy bien. Le diría a todos aquellos que la critican que la próxima vez que vayan al hospital y tengan que operarse, no soliciten anestesia, porque el anestésico que se les va a administrar ha sido testado previamente en animales”.

«Hay que denunciar cualquier tipo de pseudociencia. Ejercer estas prácticas es irresponsable y significa jugar con los sentimientos y la vida de las personas»


¿Qué piensa de la promoción de terapias alternativas por parte de algunos profesionales sanitarios? “En todos estos aspectos, como personas que se niegan a vacunar a sus hijos, que discrepan en el uso de los transgénicos o que se agarran a un clavo ardiendo porque están pasando una enfermedad muy grave, lo que nos falta es información correcta de lo que es un tratamiento médico validado y de lo que es otra cosa que no está demostrada científicamente. Lo que hay que hacer es denunciar cualquier tipo de pseudociencia, ya que ejercer estas prácticas es irresponsable y significa jugar con los sentimientos y la vida de las personas cuando son especialmente vulnerables porque están pasando por un periodo de enfermedad».

¿Y qué se puede hacer para luchar contras estas pseudociencias? «Si hay algo que podemos hacer los que nos dedicamos a la biomedicina es separar lo que son evidencias científicas de lo que no lo son. Para ello, necesitamos la colaboración de ustedes, los medios de comunicación, que son los que tienen que dar voz a los profesionales”.

Estudiante de Periodismo en la Universidad de La Laguna. A ritmo de ciencia y Rubén Blades. Jefe de la sección de Ciencias de la Salud y Radio en Periodismo ULL.

Lo último sobre Ciencias de la Salud

Ir a Top