El tercer acto de la jornada de ayer en el III Foro Mujeres y Deporte, organizada por el Cabido de Tenerife y el Servicio de Deportes de la ULL, comenzó alrededor de las 10.3o horas con una mesa redonda moderada por la periodista Raquel Acirón. Como en anteriores ponencias, la actividad se llevó a cabo en el Aula Magna de la Facultad de Economía, Empresa y Turismo. Las ponentes destacaron la trascendencia de obtener perspectiva de género porque «es muy importante tenerlo en cuenta desde una edad temprana para poder tener libertad y elegir lo que queremos hacer».
En primer lugar, antes de entrar en materia se dio la bienvenida a las invitadas: Amanda del Rosario Hernández, especialista en Psicología Deportiva y Educativa; Elvira Hidalgo, técnica especializada en Educación Física; Goretti Mesa, gestora en el mundo del ejercicio físico, y la médica María Jesús Borrego.
Las profesionales sentenciaron que para acabar con las barreras impuestas a los más vulnerables hay que empezar por cambiar la elección de las imágenes de conferencias, celebraciones y eventos, que por defecto se encuentran marcados por el llamado heteropatriarcado. En numerosas ocasiones se insistió no solo en la desigualdad que sufren las féminas, sino también el resto de integrantes de la sociedad que, aparentemente, «no cumplen con el patrón tradicional».
«La igualdad es respeto, sin ningún matiz»
Las presentes hicieron hincapié en la importancia de educar en cualquier ámbito de la vida, ya sea profesional, escolar o social. Por otra parte, Borrego destacó el sedentarismo de la población femenina en Canarias, el cual, subrayó, supera con creces la media nacional. Asimismo, apuntaron que un gran número de niñas sienten presión a la hora de practicar deporte debido a las comparaciones que se hacen con los niños.
Se hizo mención a los Juegos Olímpicos, en especial a casos muy sonados como el de María José Martínez Patiño, corredora con un alto índice de testosterona y a quien se le exigía demostrar su feminidad. En cambio, al conocido nadador Michael Phillps, cuyos brazos mayores que la media le hacían nadar con mayor ventaja, se le consideró como «una bestia».
«No se puede permitir que las jóvenes acepten y crean que son simples objetos»
Otro dato ofrecido en el debate fue que el 45 % de los participantes en las Olimpiadas son féminas, sin embargo, su presencia en televisiones es tres veces inferior a la del sexo opuesto. A su vez, como los titulares que acompañan a las deportistas suelen estar sometidos a un alto nivel de discriminación, se hizo un llamamiento a los medios para rectificar y mostrar otras virtudes que tienen estas profesionales.
Además, aunque se admitió que ninguno de los dos tipos de naturaleza son iguales, «hay que desarrollar y reconocer los méritos de ambos». Asimismo, Goretti Mesa subrayó que «no se puede permitir que las jóvenes acepten y crean que son simples objetos».
La conferencia terminó con un pequeño reconocimiento a África Meneses, primera mujer árbitra de la lucha canaria.