La nueva identidad gráfica de la Universidad de La Laguna, aprobada por el Consejo de Gobierno del centro académico y desarrollada por la Agencia Theam tras superar un proceso de selección competitiva, no ha concitado aceptación por los universitarios y profesionales que la han valorado. Así, una encuesta realizada en el Facebook de este diario digital entre 928 personas, concluye que el 85 % la rechaza, decantándose por la que todavía, hoy en día, está vigente. Mientras, la plataforma change.org cuenta ya con cerca de 1700 firmas para que el rector, Antonio Martinón, realice una consulta pública que permita a la comunidad universitaria decidir si quiere que se cambie el logo y la imagen de la misma.
El proceso de selección estuvo supervisado por una comisión técnica integrada por el director de Secretariado de Comunicación, Desiderio Gutiérrez; la jefa del Gabinete de Comunicación de la ULL, Cándida González; el vicedecano de la Sección de Bellas Artes, Alfonso Ruiz; y un profesor del Grado en Diseño especializado en imagen corporativa.
“Un símbolo que no se entiende es un mal signo, es como una letra mal escrita”
El diseñador Pepe Valladares, que fuera presidente de la Asociación Profesional de Diseñadores Gráficos de Canarias y con una amplia y reconocida trayectoria en la realización de identidades gráficas, como la del Auditorio de Tenerife, Titsa o Santa Cruz, el corazón de Tenerife, escribía a propósito de esta encuesta que “es gráficamente intachable pero incomprensible”, añadiendo que “un símbolo que no se entiende es un mal signo, es como una letra mal escrita”.
Pese a la abrumadora mayoría que ha mostrado rechazo, entre los que apoyan el logo se encuentra, por ejemplo, Carlos Cabeza, director de Head Group, empresa especializada en la promoción de destinos turísticos. También en Facebook escribía que “me parece brillante, innovador. Es un gran trabajo que en dos estudiados rasgos observes el contenido completo de las tres palabras que lo componen. Además creo que es muy bueno para todo tipo de adaptaciones y aplicaciones”.
Según la ULL, la nueva propuesta “responde a la necesidad de adaptar la marca universitaria a las nuevas necesidades y soportes de comunicación, posibilitando la presencia y el protagonismo de las distintas unidades, servicios e iniciativas institucionales sin la proliferación incontrolada de marcas secundarias”. Asimismo, afirma que el proyecto es paralelo a la renovación de la señalética y a la puesta en marcha de un proyecto de productos promocionales.
En la actualidad se está trabajando en la redacción del manual de uso y en una primera fase de implantación que, en principio, culminará en septiembre de este año.
