Raquel Placeres Delgado es licenciada en Psicología por la Universidad de La Laguna y cuenta con un máster en Terapia de Conducta, Psicología Clínica y de la Salud por la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED). En este momento, trabaja en el Centro de Psicología Idea donde realiza terapias y ofrece formación a través de talleres presenciales como el de la Escuela Idea para Familias. Además, es la docente encargada de impartir el curso de Evaluación y tratamiento de la depresión de forma online que oferta la Fundación General de la ULL y que empezó ayer lunes 30 de abril.
La especialista narra que decidió estudiar esta carrera por la fascinación que el conocimiento del comportamiento humano despertaba en ella. «Siempre me llamó la atención intentar comprender la razón por la cual las personas actuaban de una determinada manera», explica, a la vez que insiste en el privilegio que supone que la gente confíe en su profesionalidad para contarle aspectos sobre su vida que, quizá, no comparte con nadie más.
Una profesión vocacional
Por esta razón, su vocación como psicóloga fue determinante para elegir la disciplina: «Se trata de una profesión que te permite ayudar en ámbitos tan privados y tan intensos como el entorno personal». Aunque no descarta dedicarse en un futuro a la investigación. Recalca que el contacto directo con los pacientes le resulta verdaderamente apasionante.
Respecto a su perfil docente en la FGULL, señala que los cursos que se ofertan en la entidad universitaria están elaborados por las tres integrantes del Centro Idea, incluida ella. Posteriormente se reparten la impartición de cada taller. «Empezamos el cuatrimestre pasado con el seminario de Evaluación y tratamiento para el trastorno de estrés postraumático, y debido a su buena acogida, en este mes de abril comenzará la segunda edición, a cargo de mi compañera Raquel Molina», apunta.
En cuanto a la formación online, que dictará para la Evaluación y tratamiento de la depresión, se trata de la primera vez que se realiza. Placeres considera que este taller es muy importante para que los alumnos recién graduados posean una educación específica en este campo: «El propósito es aprender cómo proceder directamente a la hora de evaluar esta enfermedad. En los libros aparece de forma teórica, pero lo significativo es que sepan realmente, de una forma más práctica, cómo acercarse al paciente». Por tanto, la metodología empleada para dictar estos conocimientos se basa en centrarse en aspectos muy concretos y darlos mediante ejercicios.
«Damos paso a paso las directrices que se debe seguir un psicólogo»
La experta explica que durante las fases de la evaluación y tratamiento llevadas a cabo por un psicólogo, lo primero que se debe tener en cuenta es cómo proceder: «Cuando vas a hacer la valoración de un determinado trastorno, tienes que saber qué cuestionarios realizar, qué es importante conocer para lograr un buen diagnóstico, y posteriormente una satisfactoria intervención». En este punto, afirma que esta es otra de las razones por las cuales el curso es tan necesario: «Damos paso a paso las directrices que debe seguir el profesional de la Psicología».
Asimismo, expone que siempre hay que adaptarse a los requisitos específicos de cada paciente, por eso es vital tener en cuenta cómo acercase a ellos. Además, afirma que el proceso de evaluación nunca termina porque a medida que se está realizando la intervención, también se valora «si requerimos de un feedback para saber cómo está la persona y entender si va mejorando o no porque el tratamiento puede ser incorrecto».
Activación conductual
Desde una perspectiva más cercana al individuo, Raquel Placeres considera que las claves para afrontar la depresión se basan en «pedir ayuda para ponerte en manos de un buen profesional y seguir con una intervención de activación conductual». Es decir, «en esta enfermedad se produce el ciclo letárgico, que consiste en que cuando las personas padecen un estado de ánimo bajo, pues dejan de hacer las labores que normalmente realizaban, y esto a su vez genera que se encuentren peor, y se origina una órbita semejante a la pescadilla que se muerde la cola».
Por este motivo, la experta afirma que es muy relevante dicha activación conductual: «El paciente vuelve a practicar las actividades diarias, y que sobre todo sean agradables, para así conseguir una rutina. Se trata de incluir poco a poco elementos satisfactorios, con el fin de obtener una retroalimentación positiva».
Formaciones según las inquietudes de los estudiantes
En cuanto a los futuros proyectos, la psicóloga subraya que las integrantes del Centro Idea están elaborando los informes para presentar en la FGULL nuevas propuestas de cursos que abarquen diferentes trastornos como las disfunciones sexuales. «El objetivo es ofertar talleres sobre aspectos que nosotras veamos que reclaman los alumnos o que pueden ser interesantes», señala.
Por último, la experta expresa la satisfacción que siente cuando imparte clases como docente, debido, entre otros elementos, al alto grado de conocimiento que sus alumnos son capaces de otorgarle. En este sentido, afirma que le gusta muchísimo dar estos ciclos porque le permiten tener un gran feedback con los estudiantes, «ya que te cuentan tantos sus experiencias como sus dudas. A su vez, esto te hace reflexionar bastante acerca de lo que tú ya sabes. Incluso, te pone a prueba porque te das cuenta de que hay preguntas que puedes resolver, y otras que no. Además, me resulta emocionante compartir la misma vocación y motivación con ellos».
