En la sección de Enfermería de la Facultad de Ciencias de La Salud de La Universidad de La Laguna se practicó ayer, jueves 22 de febrero, entre las 9.00 y las 14.00 horas, un simulacro dirigido a los alumnos de tercero de grado, en el que profesionales sanitarios y equipos de emergencia impartieron talleres con el objetivo de que los estudiantes adquieran los conocimientos y habilidades necesarias. Esta actividad de frecuencia anual se encuentra enmarcada dentro de un seminario de prácticas, y forma parte de la asignatura Atención de enfermería en urgencias, emergencias sanitarias y catástrofes.
«Es de vital importancia conocer este tipo de situaciones ya que le servirá a los estudiantes para su futuro profesional», apuntó la profesora Ángela Ortega, responsable del ejercicio. La docente también participó en algunas actividades y talleres y remarcó su importancia. Comentó que “el aprendizaje de estos procedimientos médicos especializados son indispensables para afrontar determinadas situaciones reales como accidentes de tráfico o catástrofes» y añadió que “los alumnos aprenden a sacar a los heridos de los coches correctamente, practicar la valoración del paciente y estabilizarlo. Además se entrenan en todos los procedimientos de seguridad que se tienen que llevar a cabo».
Los enfermeros en formación pueden conocer el material con el que los equipos sanitarios y de rescate actúan, así como las ambulancias o todas la herramientas médicas necesarias para ejecutar la labor. Los conocimientos que deben adquirir los futuros profesionales no solo son médicos sino también de seguridad. “Cuando nos topamos con una situación de urgencia, lo primero que debemos hacer es evaluar el entorno para trabajar sin riesgos”. Para Ortega, el conjunto de las actuaciones que se tienen que llevar a cabo van desde la prudencia y el equipo hasta las técnicas empleadas por el médico para atender al enfermo. “Un buen profesional debe realizar correctamente una intubación, en el caso de que el paciente no esté estabilizado tras una catástrofe».
Para que estos talleres fueran posibles acudieron, a los aledaños del recinto universitario, tres ambulancias de soporte vital básico y especializado, al igual que un camión de bomberos del Consorcio de Tenerife. Todos ellos disponían de un amplio equipo dotado de camillas, equipo quirúrgico, herramientas, muñecos para realizar reanimaciones, etc. En algunas de las aulas se dictaron diferentes charlas en las que se mostraba cómo se debe de atender al paciente y cuál es la posición adecuada, por ejemplo. Los estudiantes se repartían en pequeños grupos a lo largo de las prácticas que fueron acompañadas de una detallada explicación por parte del profesional al mando.
Se realizaron, también, varias demostraciones en las que intervenían los futuros sanitarios asumiendo el papel de pacientes o bien, de especialistas. Este tipo de simulacros, que en el día a día suceden de forma real, representan una inversión de futuro en la formación de los alumnos. «Estos seminarios y prácticas fomentan, no solo superar la asignatura y el grado sino, conseguir una experiencia que podrán aplicar a su vida profesional y laboral», concluyó la enfermera Ángela Ortega.