“Sin ellas no estaríamos hoy aquí”

Artes y Humanidades

La jornada titulada El papel de la mujer en la emigración canaria se desarrolló ayer viernes, con motivo del X aniversario de la Asociación de Mayores de la Universidad de La Laguna. El acto tuvo lugar en el Instituto de Estudios Canarios, en La Laguna, a partir de las 18.30 horas, suponiendo el broche de oro al Cine Fórum: La emigración Canaria a América. En primer lugar, se presentó el nuevo documental de Federico José Pérez llamado La mujer rural en Tenerife, donde se narra el caso de varias afectadas por la era campestre que fueron forzadas a continuar solas. Posteriormente, María Eugenia Monzón, profesora titular de Historia moderna en la ULL, habló sobre el caso de las féminas en estos movimientos migratorios.

A través del corto, el autor quiere mostrar la importancia del género femenino durante la huida de los hombres hacia otros continentes en la sociedad rural, debido a las duras circunstancias económicas del momento. «Cuando los esposos se veían obligados a salir del país, eran ellas quienes cuidaban a la familia, sacaban adelante el país y mantenían la unión de los miembros», se afirmó durante el film.

Federico José Pérez, director del documental La mujer rural en Tenerife.

Así, relata la historia de varias mujeres que se quedaron a cargo de sus hijos y de la casa cuando los varones no estaban. Como principales víctimas de un siglo de miserias, acuciado por la pobreza, su labor para poder sobrevivir les llevaba a cargar kilos de alimentos, ya que era inexistente el transporte en las Islas durante ese ciclo. A su vez, las perjudicadas mantenían la granja o sembraban, vendían comida o realizaban artesanía para conseguir dinero. Todo ello, demostrado mediante imágenes.

Ellas, las olvidadas


Por ese entonces, hacían el papel de las cabezas de familia, sin embargo, nunca se las tuvo en cuenta, según María del Pino del Rosario Delgado, presidenta de la asociación Afammer en Tenerife. “Siempre son la parte desfavorecida de la emigración. El protagonista es quien se va”, declaró.

Por otro lado, Monzón, a lo largo de los años, ha estudiado en profundidad el rol femenino en la cronología, así que expuso varias de sus averiguaciones. Mediante sus indagaciones se dio cuenta de la lenta evolución y de la revolución silenciosa que se produjo para que, hoy en día, se visibilice a las campesinas, agricultoras…, todas aquellas que tengan que ver con lo rural. Señaló que “sin ellas no estaríamos hoy aquí” y que «tenemos que reconocer a nuestras antepasadas».

Aseguró que «el éxodo en Canarias es algo continuo y que todos tenemos a un ser cercano fuera». Asimismo, durante su ponencia, mencionó que los documentos demuestran que las consecuencias principales de las fugas eran “para mejorar las condiciones de vida, buscar su vida porque su oficio es de ojalero…”.

Eran viudas sin serlo


También indicó que las féminas se vestían como viudas durante la partida de sus parejas hasta saber si habían llegado a puerto. En este sentido, explicó que se crearon los términos de “mujeres con maridos en India, viudas de los vivos, viudas de América o viudas blancas”, ya que no tenían al hombre junto a ellas. Referente a ello, confesó que se les llamaban “mujeres solas” por la misma razón de no estar viviendo con un varón.

«Sin su cónyuge no tenían ninguna autoridad». De esta manera, describió la historia de una madre que tuvo que pedir permiso al poder para que su hijo pudiera estudiar. Al mismo tiempo, la docente sostuvo que las familias mantenían el contacto mediante correspondencia, pero que otras muchas, no sabían nada de su pariente.

Otro aspecto que destacó la doctora fue la posguerra que “abocó a muchos canarios a la emigración”. En su período se creó la cartilla de racionamiento, y es ahí, por el hambre que había, cuando las mujeres empezaron a trabajar y a recibir un salario mínimo para poder subsistir. “Las mujeres eramos complementarias al trabajo de los hombres y por eso recibíamos poco dinero”, relató. También, aseveró que hasta la década de los 40 estaba prohibido buscarse la vida en otro territorio.

Para concluir, la investigadora recordó que durante el franquismo la educación estaba orientada a ser amas de casa, y ellas mismas se menospreciaban. «Hay que resaltar a todas esas pioneras que han transformado y mejorado el papel de la mujer en la sociedad», sentenció.

Estudiante de Periodismo en la Universidad de La Laguna. Tinerfeña. Si algo debes saber de mí es que adoro leer. Me apasiona el mundo del cine, de las series y la moda. También me gusta pasar tiempo en las redes sociales, admito que me encanta cotillear. No puedo estar más de un día sin escuchar música y siempre es un buen momento para sacar alguna foto.

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