La indagación informativa que cubre 360 son historias que no aparecen en los medios de comunicación, o aquellas que se cuentan por capítulos separados. “Hacemos periodismo de investigación porque hay temas urgentes que necesitan dedicación”, explicó el director. Además, en su nuevo ejemplar, se han adentrado en temas más complicados, ya que “hay un sector de la población que demanda este tipo de información: más pausada”.

Con motivo del 8-M, el equipo recurrió a la situación de la mujer como asunto principal. Su abordaje abarca cuatro ámbitos: los medios de comunicación, el entorno laboral, el social y, finalmente, el judicial. De este modo, se analiza el trato informativo del tema, donde, lejos de realizar un acto de denuncia y erradicación de actitudes machistas, se distingue una posición neutral ante “un problema histórico que nos afecta a todos”. Asimismo, proyecta la voz de víctimas de violencia de género que han querido aportar sus testimonios con sus nombres. Sin embargo, los apelativos aparecen bajo el anonimato o nombres ficticios, con el fin de proteger sus identidades.

Más allá de este extenso reportaje, el número cubre otros muchos campos. Con el fin de dar visibilidad a una figura importante del deporte, se incluye una pieza sobre el árbitro. Del mismo modo, tiene como objetivo el entendimiento del mismo por parte de la sociedad, con ayuda del Comité Interinsular Tinerfeño de Árbitros de Fútbol. Por otro lado, el ejemplar incorpora un análisis de denuncia sobre la arena y lo que supone su comercialización para los habitantes del país de extracción: los saharuis. Entre otras temáticas se encuentran la crisis de los refugiados, los impuestos del azúcar, el tráfico en Canarias y una entrevista a Abubukaka, un proyecto producto de cuatro estudiantes de la Escuela de Actores de Canarias.

Finalmente, se destacó la importancia de apostar por el papel y, una vez más, la transcendencia de entender lo que se cuenta. Por ello, Toledano dejó claro su propósito principal: “Nosotros intentamos ayudar a entender la realidad”.

En el número cero, el tema principal que abordaron fue la precariedad laboral. En esta ocasión, se centrarán en la situación de la mujer en los distintos ámbitos de la sociedad, como el judicial, el social o el mediático. Asimismo, tras haber analizado el tratamiento informativo que recibe el continente africano en España, la sección internacional de la revista estudiará la importación de arena por parte del Archipiélago, así como las relaciones comerciales con Marruecos y el Sáhara.

Otros reportajes que se podrán leer versan sobre la crisis de refugiados, la situación del arbitraje en Canarias o el impuesto del azúcar. También la cultura estará presente, ya que se reflejará cómo vive la agrupación humorística Abubukaka los minutos previos a sus actuaciones. Del mismo modo, la revista cuenta con un fotoreportaje sobre el tráfico en las Islas, incluyendo datos sobre el número medio de horas que un canario puede pasar en el coche, o la gasolina empleada.

En esta, se detalla cómo tuvo lugar la filtración de datos clasificados de la NSA por parte de Edward Snowden, un antiguo trabajador de la agencia de inteligencia, y los periodistas con los que la llevó a cabo desde Hong Kong. El profesor y periodista que organizó este encuentro, Samuel Toledano, argumentó que fue elegida como ejemplo de la clase de labor que se requieren a la hora de informar detalladamente a la sociedad.

Por su parte, Trigo comentó que pretenden conseguir sacar el próximo junio 700 ejemplares de 360 en su primera tirada. Sería el primer paso de una revista que, aunque empezó como un plan de innovación docente en el marco de la asignatura Periodismo de Investigación, busca ser vendida en la calle con la intención de comunicar en profundidad a los lectores.

Los temas que, tal y como la estudiante adelantó, van a ser tratados en las próximas ediciones -esperan poder sacar cuatro al año- destacan por la delicadeza que implican y su menor presencia en los medios. Algunos de ellos son los relacionados con la pobreza canaria y la precariedad laboral, la situación de África en la prensa o el deporte femenino. “Estos temas preocupan a la gente, pero no ocupan lugar en los periódicos, y nosotros queremos cubrir ese hueco”, concluyó la alumna.

Los tres coincidieron en que esta vertiente se ha visto fuertemente deteriorada desde la llegada de la crisis económica, aunque cada uno abarcó el tema desde diferentes puntos de vista. Rodríguez argumentó que a los medios no les resultan rentables este tipo de tareas que buscan analizar la actualidad en profundidad desde una perspectiva más amplia. Aseguró que requieren muchas horas de trabajo y, por tanto, una gran inversión de capital: “Cuesta investigar porque investigar lleva tiempo y el tiempo cuesta dinero”, comentó la periodista de TVC.

Por su parte, Millet reconoció que, aunque los periódicos locales no pueden permitirse disponer de un equipo dedicado exclusivamente a la investigación, intentan desarrollarlo más a menudo. Éstas no suelen generar en la opinión pública la reacción esperada por los profesionales, lo que provoca insatisfacción tras el esfuerzo realizado. “Después de destaparse el caso de las Teresitas, el ex alcalde de Santa Cruz, Miguel Zerolo, ganó las elecciones con mayoría absoluta; eso a mi me genera una gran desazón”, afirmó.

En cambio, David Cuesta contó su experiencia personal con el proyecto de Despiertos en el que está inmerso y resaltó algunos de los obstáculos que presenta esta especialidad del periodismo para poder desarrollarse de forma plena: la dependencia de los medios, la precariedad de los recursos y lo molesto que éste resulta para los poderes político, económico y judicial. “Vivimos en una sociedad en la que la corrupción lo impregna todo. A quiénes tienen el poder no les interesa que venga el periodista de turno a poner la lupa sobre ellos”, recalcó el director de informativos de Mírame TV.

La cita concluyó alrededor de las  19:30 horas tras una ronda de preguntas dirigida a los ponentes, las diversas intervenciones del público y el intercambio de ideas entre las personas que asistieron al evento.