Albert Camus – Periodismo ULL https://periodismo01.ull.es Diario digital de la Universidad de La Laguna Thu, 16 Mar 2023 08:01:34 +0000 es hourly 1 https://wordpress.org/?v=6.6.1 https://periodismo01.ull.es/wp-content/uploads/2016/04/cropped-PULL_Redondo-1-32x32.png Albert Camus – Periodismo ULL https://periodismo01.ull.es 32 32 La obra teatral ‘Juicio al extranjero’, de gira en el Teatro Guimerá https://periodismo01.ull.es/__trashed-18/ Thu, 16 Mar 2023 08:01:17 +0000 https://periodismo.ull.es/?p=243676 La compañía teatral Indubio Teatro continúa su gira por España y visitará el Teatro Guimerá con su obra, Juicio al extranjero, los próximos días 17 y 18 de marzo, a las 20.30 horas. La pieza escrita y dirigida por Iñigo Santacana, trata temas de revuelo social mientras busca una conexión por parte del público, que se convertirán en protagonistas durante todo el transcurso de la representación. Las entradas se encuentran disponibles en la web del Teatro Guimerá.

«Quiero que la gente reflexione en base a que juzgamos a las personas», afirma el director, que busca dar visibilidad a los problemas sociales a través de la participación del público. La obra tiene cómo punto de partida la novela El Extranjero, de Albert Camus. Santacana se basó en las historias de Camus para posteriormente, con una serie de adaptaciones, trasladarla al teatro y representarla haciendo hincapié en determinados momentos.

«Los actores somos unos guías, pero el público son los personajes», así afirma Santacana cómo es el transcurso de la obra. Señala que Juicio al extranjero busca que las personas que asistan se fijen en su interior e intervengan en la obra, de manera que ayuden a que el transcurso de esta sea más llevadera. La pieza va dirigida a la juventud y el alumnado universitario.

La compañía Indubio Teatro, comenzó en enero una gira por España presentado Juicio al extranjero en todo el país. Santacana también forma parte Indubio, el cual asegura «su próxima obra saldrá en septiembre de 2023», manteniendo siempre al público partícipe durante sus espectáculos.

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Las redes que olvidan el dolor ajeno https://periodismo01.ull.es/las-redes-que-olvidan-el-dolor-ajeno/ Sat, 10 Sep 2022 06:00:07 +0000 https://periodismo.ull.es/?p=225083 «Solo hay un problema filosófico realmente serio: el suicidio». Con este razonamiento comienza El mito de Sísifo, un ensayo de Albert Camus que analiza, a través de la filosofía del absurdo, las posibles alternativas existentes al suicidio. Supongo, que en el año 1942, fecha en la que se publicó el libro, también se hablaba de señales de alarma para identificar este tipo de conductas. Hoy, ochenta años más tarde, se habla del 10 de septiembre como el Día Mundial para la Prevención del Suicidio

Entro en mis redes sociales. Veo infinidad de publicaciones que tratan de explicar los métodos preventivos. Mitos y realidades. Lo que se supone que debes hacer si una persona te cuenta que ha tenido, alguna vez, pensamientos de quitarse la vida…

Intuyo que el objetivo principal es concienciar, pero no puedo evitar pensar en la hipocresía que existe en las redes sociales. Subimos stories tratando de mentalizar y mentalizarnos de la situación de desesperanza que tiene que vivir una persona para decidir acabar con su vida. Sin embargo, las mismas personas que comparten una foto con el #DíaMundialparalaPrevencióndelSuicidio son quienes se reían de su compañero de clase porque consideraban que era débil. Quienes critican la foto que subió a Instagram la chica del instituto que nunca habla. Quienes se creen con el derecho de opinar acerca del cuerpo o de la forma de vestir de los demás. 

«Hemos creado una sociedad ciega de apariencias, vacía y desvalorizada»

Todo esto me lleva a reflexionar que, por desgracia, pesa más el postureo de ser activista en redes que la empatía con el dolor ajeno. Mañana, cuando pase este día, nadie va a compartir nada acerca del tema. Nadie va a hablar de que el 024, línea telefónica de asistencia al suicidio, recibió más de mil llamadas el primer día que se puso en ejecución. Tampoco nadie se va a alertar porque durante el primer mes de funcionamiento, fueron 15 000 las personas que «llamaban a la vida».

Todo indica a que hemos creado una sociedad ciega de apariencias, vacía y desvalorizada. Carente de solidaridad. Una sociedad que cree que ayuda más difundiendo una frase positiva que escuchando a la persona que tienen al lado y quizás, pide auxilio en silencio, pero tu egoísmo no te deja verlo. 

El miedo a la muerte es el más común en el ser humano. No existe persona que quiera morirse, eso es un hecho. Me veo incapaz de hablar acerca de lo que tiene que pasar por la cabeza de alguien cuando decide acabar con todo, aún sabiendo que el desenlace es aquello a lo que tanto temía. Sin embargo, sé que algo estamos haciendo mal si creemos que ayuda significa compartir algo en la superficialidad de las redes. 

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‘La peste’ en tiempos de coronavirus https://periodismo01.ull.es/la-peste-en-tiempos-de-coronavirus/ Sat, 13 Feb 2021 10:00:49 +0000 http://periodismo.ull.es/?p=151820 Es habitual que en tiempos de pandemia, con restricciones que dificultan el ocio, se encuentre una vía de escape en la lectura. Lo curioso de ello es encontrar una novela en la que se puede identificar la actualidad que vivimos, pese a haber surgido de forma inesperada. En La peste, de Albert Camus, descubrimos que esta nueva realidad no es tan nueva como creíamos. Incluso, podemos ver nuestro reflejo en ella 74 años después de haber sido publicada.

Camus (1913-1960), Nobel de Literatura en 1957 e importante exponente existencialista, es conocido por escribir El extranjero, la colección de ensayos El hombre rebelde y La peste. Esta obra se ambienta en el Orán del siglo XX, ciudad argelina de gran importancia bajo dominio francés durante el periodo de colonización. Está considerada como una obra clásica de la literatura contemporánea, y es una de las novelas francesas más importantes escritas tras la Segunda Guerra Mundial.

«Ya es hora de que esto termine»


Pese a las diferencias de tiempo y espacio, evoca sentimientos y vivencias que hoy nos son muy cercanas. Tras un largo periodo de incertidumbre, dolor y muertes, la ciudadanía de Orán desarrolla un hartazgo hoy comparable con la fatiga pandémica. «Todos experimentaban sentimientos monótonos. ‘Ya es hora de que esto termine’, decían».

La angustia de una separación repentina e indefinida de los seres queridos y de la sociedad es uno de los grandes temas de la novela. Reflexiona en torno al sufrimiento humano, haciendo referencia a la dificultad de mantener la salud mental en un contexto de confinamiento e incertidumbre. Todos los temas giran en torno a preocupaciones derivadas de la enfermedad. Desde el momento en que se declara el brote oficialmente, «se puede decir que la peste fue nuestro único asunto.» El toque de queda, el cierre de tiendas y bares, los procesos de desinfección, la falta de trabajo, el verano perdido, e incluso la caída del turismo y la economía.

De forma secundaria, aunque muy reveladora, Camus alude a la diferencia que se genera entre personas ricas y pobres. El aprovisionamiento de artículos de primera necesidad se complica con el tiempo, y solo queda al alcance de quienes tienen una buena posición económica. En este aspecto, el autor coincide parcialmente con su antecesor Daniel Defoe en Diario del año de la peste (1722). Aunque alude a que ante las epidemias toda la gente es igual, reconoce que el sector más pobre fue el gran perjudicado al no poder huir a zonas alejadas o quedarse en sus casas sin trabajar. Defoe, además, remarca la importancia del personal sanitario con reiteración, considerándolo vital pero escaso para combatir la enfermedad.

Que no cunda el pánico


La peste tiene sus inicios en la primera rata muerta que encuentra el doctor Bernard Rieux en el rellano de la escalera. Con el paso de los días, las montañas de ratas se acumulan en las calles, y no tardan en aparecer los primeros casos de peste en humanos. Con la prioridad de evitar que cunda el pánico, las medidas de contingencia no se toman a tiempo, y la población se ve expuesta a una situación para la que no estaba preparada.

El agotamiento y el sufrimiento van poco a poco haciendo mella en los personajes. Se contradicen entre la indiferencia, el malhumor y el miedo a medida que la peste avanza y la forma de manifestar el dolor evoluciona. Pero surge en ellos una solidaridad creciente, que culmina en un final agridulce, divido entre la alegría por haber terminado la pesadilla y el dolor por todo lo perdido.

Introspección psicológica


En otro contexto, esta novela no sería tan significativa, e incluso podría resultar un poco incomprensible. Hoy, tras todo lo vivido, puede servir como un espejo para ayudar a identificar las emociones que suscita una crisis sanitaria de tal calibre. Y es que queda claro que más allá de la propia enfermedad, tiene una importancia crucial cómo nos afecta en una dimensión psicológica.

Entre sus muchas reflexiones, Camus nos enseña que, aunque sepamos que las epidemias -y también las pandemias- se reproducen históricamente, siempre nos cogen por sorpresa. Hoy leemos a Camus, y a otros muchos autores que escribieron sobre diversos brotes. Mañana, tal vez leamos grandes novelas escritas en tiempos de covid-19 sobre videollamadas, confinamientos y mascarillas.

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Juan Cruz: «Los periodistas son los primeros que no valoran su oficio» https://periodismo01.ull.es/juan-cruz-los-periodistas-son-los-primeros-que-no-valoran-su-oficio/ Wed, 30 Oct 2019 07:15:43 +0000 http://periodismo.ull.es/?p=112346 Juan Cruz Ruiz es un periodista y escritor canario nacido en el Puerto de la Cruz. Se licenció en Ciencias de la Comunicación en la ULL y publicó por primera vez en un periódico cuando tenía tan solo trece años. Desde entonces, no se ha separado de este oficio, como él lo llama. Fue uno de los fundadores del diario El Paísdonde publica con frecuencia al igual que en la Cadena Ser, ambos del grupo PRISA. Además, desde mediados de este mes de octubre es el presidente del Consejo Social de la Institución lagunera.

¿Qué es lo nunca hay que hacer en una entrevista? «Opinar. Dar por sentada la respuesta y hablar de sí mismo. El periodista es transparente. El protagonista siempre es el entrevistado. Es en el que has mostrado interés. Debes olvidarte de ti mismo y preguntar. Eso nutre las entrevistas. La otra persona estima que estamos interesados en ella».

Ese interés por conocer a los entrevistados se refleja en tu obra Literatura que cuenta. Entrevistas con grandes cronistas de América Latina y España, ¿verdad? «A mí me interesaba saber cómo la escritura se convertía en periodismo. Como lo que parece perfecto proviene de una capacidad de leer la realidad para contarla. Ese es mi propósito cada vez que escribo un texto. La escritura es la consecuencia de lo que ves y de lo que te han contado».

¿Podría poner algún ejemplo? «Hace un mes escribí un artículo sobre un acto de Pedro Zerolo en donde dije que él actuó de una determinada manera para seguir existiendo. Un compañero del Consejo Social de la ULL, que ahora presido, me dijo que solo por esa oración valió la pena leerlo. Él desconocía que estuvo inspirada en una canción interpretada por Ute Lemper en la Fundación CajaCanarias llamada A dónde se han ido las flores. Eso me emocionó mucho. Para mí es muy importante que haya sentimiento en la escritura porque es la sintaxis de lo quieres explicar».

«Ahora la universidad me quiere cambiar, pero no lo logrará»


En tu libro Un golpe de vida afirmó que durante una estancia en Londres sintió vergüenza por ser escritor. ¿Alguna vez se ha avergonzado de ser periodista? «Nunca. A mí me daba vergüenza decir que era escritor porque era periodista. Asimismo, cuando estoy triste soy escritor. Llevo así desde los trece años. Ahora la universidad me quiere cambiar, pero no lo logrará».

Siempre se refiere al periodismo como oficio. ¿Por qué no profesión? «Porque requiere de instrumentos como la carpintería. Además, tiene más valor esa palabra. El oficio genera a otros trabajando contigo, necesitas a la gente para contar. Una profesión la puedes ejercer detrás de la mesa de un despacho».

¿Se ha sentido alguna vez abandonado por el oficio? «Sí, pero igual que con las chicas, vuelve a ti enseguida, basta que haya una noticia. En ese instante te sientes válido para ejercer. Se activa enseguida esa energía. Un profesional de la comunicación nunca puede dimitir».

¿Por qué cree que ha llegado a sentirse así? «Uno no es sentimentalmente perfecto. A veces tienes bajones como cualquiera. Eso sí, en el periodismo también funciona el ego y que alguien te estimule. Si percibes indiferencia alrededor, tiendes a perder el interés».

«Los rumores forman parte de lo que hacen los periodistas»


Ha llegado a decir que el periodismo es invencible. ¿Se puede hablar de eso teniendo en cuenta los intereses políticos y económicos que hay detrás? «Si esos intereses fueran tan potentes, hace siglos que hubiera desaparecido el oficio. Es invencible porque la gente necesita el conocimiento de las noticias».

¿Se valora nuestra actividad en España? «Yo creo que no. Pero hay algunos que no lo valoran en absoluto: los periodistas. Se han dedicado a cambiarlo por opiniones y, en realidad, requiere saber y comprender. Depende de la disciplina de la verificación en todo momento».

En una entrevista que dio en Late Motiv dijo que es muy complicado sobreponerse al rumor. ¿No es esto perder la fe en el oficio? «Ahora los rumores forman parte de lo que hacen los periodistas. Si ellos no son capaces de sobrellevar esa amenaza, imagínate la sociedad entera. Esta depende mucho de nosotros».

¿Cree que el periodismo actual será digno de ser considerado la literatura del siglo XXI? «Está en camino de ello. Encuentro ahora a excelentes cronistas, y hablo de los de verdad: los que son capaces de darle música a los hechos. Por otro lado, si renuncia a los hechos y dispone de los adjetivos para impresionar no es periodismo. Hay que encomendarse al dios del periodismo y no rezar a adjetivos. El redactor jefe que tenía Hemingway durante sus crónicas sobre la Guerra Civil española le decía que le mandara únicamente verbos».

«Para escribir bien hay que leer mucha poesía»


¿Cuáles son sus referentes en el oficio? «Me gusta mucho Vásquez Montalbán y Gay Talesse. Me atrae el plano americano de Leila Guerreiro… Para escribir bien hay que leer mucha poesía, te da música. Los hechos los narras a partir de ella, mientras escribes sabes que eso es nutritivo para el lector».

¿Y en la poesía? «Borges, Lorca, Szymborska, Dante… Hay un gran periodista argentino, Tomás Eloy Martínez, que tiene un libro titulado Lugar común la muerte, que son sus crónicas con escritores. Se trata de un ejemplo de periodismo hecho con música».

¿Qué lecturas recomienda  a estudiantes de Periodismo? «Les haría leer Vida de escritor, de Gay Talesse. Además, algunos libros de Manu Leguineche. Hay que leer».

En el prólogo de su libro mencionado anteriormente sobre crónicas dice lo siguiente: «Soy culpable de ese defecto mayor entre los periodistas, la envidia de escritura». ¿A qué escritores ha envidiado? «Hay una frase de Albert Camus que dice: ‘El sol que brilló sobre mi infancia me privó de todo resentimiento’. Yo no creo que tenga envidia, es algo que dura en mí apenas unos minutos. Luego me alegro del éxito ajeno. Desprenderse de este sentimiento es una gimnasia. La envidia es una sublimación de la soledad, si no te alegras estás solo».

«Es más fácil mentir en la Red que en soportes lentos»


Ha llegado a definir a los periódicos como el olor a papel. ¿Cómo percibe la digitalización? «Me preocupa que Internet no esté suponiendo un freno para el rumor. Es más fácil mentir en la Red que en soportes lentos».

La radio fue su escuela para aprender sintaxis. ¿Después de tantos años qué le ha enseñado el periodismo? «Me gusta fijarme en cómo lo hacen otros. Últimamente, me he centrado en la crónica. Te obliga a sentir que los hechos pesan y que no puedes dar tu opinión enseguida».

¿Qué tipo de novela es la realidad española? «Lluvia fina, de Luis Landero. Es un retrato de la locura compuesto de envidia, fuego y furor que desencadena conflicto en la falta de sentido común».

¿Nos está cegando la superficialidad sabiendo que hay tantas pequeñas revoluciones (feminismo, ecologismo, economía circular…) intentando hacerse un hueco? «La divisa de la época es la superficialidad. Todo está hecho deprisa para ver quién convence al otro del último eslogan. La gente se para unos segundos en la noticia e inmediatamente opina sobre ella».

«El silencio es un asunto muy serio»


En Crónica de una nada hecha pedazos repite mucho la palabra isla. ¿Qué significa para usted? «En el momento en el que la escribí no había salido de Tenerife. Tiempo después encontré una frase de Samuel Beckett que decía lo siguiente: ‘Uno nunca deja la isla’. Por aquel entonces me agobiaba Tenerife. La razón es que siempre hay alguien que te pregunta que cuándo te vas».

Escribe mucho sobre el silencio a pesar de ser un amante de la comunicación. ¿No es curioso? «Es que el silencio es comunicación. Se trata de una manera de dirigirte al otro y está lleno de palabras y versos. Es un asunto muy serio».

¿Hace falta más silencio en el periodismo español? «Por supuesto. El silencio es un respeto a la realidad. Es una pregunta. La vida está llena de silencio. Lo que es indecible está lleno de significado. El mundo aceptó que la conversación dejara de existir hace veinticinco años con la llegada de Internet. Con él nació una nueva conversación. Decía Joyce: ‘Ya que no podemos cambiar de país, cambiemos de conversación'».

¿Se ha resistido a contar alguna historia? «Cuando no sé contarla, no lo hago. Si no sé narrarla bien o preocupa a alguien, lo evito. Antes era muy indiscreto, pero ha mejorado mi forma de ser a ese respecto. Creo cada vez más en el respeto a la gente».

¿Qué le empujó a publicar siendo muy joven? «Porque soy atrevido. La poesía es mi género por dentro. Cuando no sé qué decir, por dentro digo poesía, pero a lo mejor no la escribo. Aún así, en mi interior hay alguien diciendo versos. Luego me da miedo escribir eso, el miedo forma parte del silencio».

En colaboración con: Alexis Rodríguez, Carla Rivero y David Peña.

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Suspense, drama y comedia este fin de semana en cines https://periodismo01.ull.es/suspense-drama-y-comedia-este-fin-de-semana-en-cines/ Fri, 06 Jul 2018 10:00:12 +0000 http://periodismo.ull.es/?p=73220 Los fanáticos del suspense y el terror están de suerte este fin de semana. Como cada año, durante una noche, los ciudadanos de una pequeña región de Estados Unidos pueden cometer todo tipo de crímenes. La primera purga: la noche de las bestias  describe los inicios de este experimento sociológico que se realiza con el objetivo de disminuir el número de delitos. Se trata de la cuarta entrega de esta saga de películas creada por James DeMonaco. En esta ocasión, la dirección corre a cargo de Gerard McMurray. El filme no está recomendado para menores de 16 años.

Ocean’s 8 es una comedia, llena de crimen, liderada por mujeres. Debbie Ocean (Sandra Bullock) organiza el que será el atraco del siglo en la Gala Met, la cual se celebra anualmente en Nueva York. Este evento es famoso debido a que a él asisten numerosas celebrities. Su propósito será conseguir el lujoso collar que llevará Daphne Kluger, interpretada por Anne Hathway. Pero Ocean no estará sola en esta misión: contará con el apoyo de un reparto de lujo formado por Lou (Cate Blanchett), Nine Ball (Rihanna), Amita (Mindy Kaling), Constance (Awkwafina), Rose (Helena Bonham Carter) y Tammy (Sarah Paulson).

El debut de Segio Barrejón como director de largometrajes llega de la mano de JefeCésar (Luis Callejo), es el dirigente de una empresa en la que no es nada querido por sus empleados. De la noche a la mañana, tendrá que hacer frente a diferentes baches: traición por parte de sus socios, enfrentamientos con su mujer… Se encontrará al borde del fracaso, pero contará con la ayuda de Ariana (Juana Acosta), encargada de la limpieza de su compañía por las noches, para superar esta situación.

Historias enternecedoras y la biografía de una estrella


La vida tranquila de Erwan (François Damiens) da un giro en Sácame de dudas. Cuando descubre que su padre no es su padre biológico, comienza a investigar quién es su verdadero progenitor. Para ello, contrata a una detective, Anna Levkine (Cécile De France). Amor, risas y drama se entrelazan en esta producción de origen francés dirigida por Carine Tardieu.

Con trece años de edad, Francesc (Max Megías) queda fascinado por el libro de El Mito de Sísifo. En él, se habla sobre el suicidio y el valor de la existencia de las personas, por lo que el protagonista se introduce en la corriente del existencialismo. Así, Jean-François  y el sentido de la vida  narra la aventura que vivirá en París este personaje en busca de su filósofo favorito, Albert Camus. En este viaje, intentará descubrir cuál es el verdadero significado de su presencia en el mundo.

El documental Whitney nos cuenta el largo recorrido de una de las artistas más importantes de las últimas décadas, Whitney Houston. Gracias al testimonio de sus familiares, amigos y compañeros de trabajo podremos conocer cómo era la vida de la cantante, tanto sus éxitos como sus fracasos y problemas. Además, incluye algunas actuaciones e imágenes inéditas. La cinta está dirigida por Kevin Macdonald.

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