La rectora alabó esta iniciativa, ya que muestra la realidad de las mujeres del campo, «muchas veces invisibilizadas, infravaloradas o, directamente, ausentes». Aguilar destacó que «han trabajado muy duro para llegar donde han llegado, superando obstáculos y convenciones sociales de todo tipo, muchas veces sin vacaciones o con días de descanso a destiempo del resto de la sociedad, porque la finca o el ganado no cierran los fines de semana ni los festivos».

Pervivencia del sector

Entre los retos a los que se enfrenta este colectivo, expuso la rectora, además del propio empoderamiento como empresarias, figuran la pervivencia del sector, con muchas necesidades de un adecuado relevo generacional, los retos medioambientales para contar con un medio de vida más sostenible y respetuoso con el entorno y la introducción de innovaciones en los modos de producción y de eficiencia en la gestión.

La consejera de Agricultura, Alimentación y Pesca del Gobierno de Canarias, Alicia Vanoostende, una de las participantes en el proyecto, relata en uno de los vídeos su vocación como ingeniera agrónoma y su trayectoria profesional hasta hoy. También participa María del Rosario Fresno, directora científica del Instituto Canario de Investigaciones Agrarias (ICIA).

Forman parte del proyecto Candelaria Rodríguez, presidenta de la Cooperativa del Campo La Candelaria; Iballa González, gerente de la Finca Ecológica Carbonero, y Pilar Carballo, también gerente de la Finca Ecológica La Jara.

El acto fue presentado por la rectora, Rosa Aguilar, acompañada de la consejera de Agricultura, Ganadería y Pesca del Gobierno de Canarias, Alicia Vanoostende, quien señaló que es muy importante buscar «alternativas al turismo de masas» y ofrecer, además, un «turismo diferenciado», que resulte de la visión dual entre el sector primario y el propio turismo. «Se trata de aportar facilidades al sector» y destacó que en ese sentido la cátedra universitaria está cumpliendo su función.

La Cátedra de Agroturismo y Enoturismo de Canarias pretende facilitar una tarea al colectivo emprendedor de bodegas y establecimientos específicos, que, por lo general, son pequeñas empresas basadas en la multitarea de su personal, suministrando una imagen que les allane la búsqueda de señalética apropiada para cubrir la necesidad y sin coste.

Se trata de un proyecto de innovación supraautonómico en el que participan las comunidades de Madrid, Valencia y Canarias con el objetivo de impulsar el consumo de productos ecológicos en los comedores de los centros públicos de las comunidades participantes. El presupuesto de este proyecto asciende a 600 000 euros con cargo al Fondo Español de Garantía Agraria de la convocatoria 2019 del Ministerio de Agricultura.

La consejera destacó que se trata de un proyecto estratégico para el cambio y la transición ecológica en Canarias, en el que se pretende multiplicar por ocho los comensales de ecocomedores, «lo que significaría también multiplicar por ocho los productores ecológicos de las Islas». En ese sentido señaló que «es un proyecto único y necesario con objetivos ambiciosos».

La consejera explicó que pretende repetir el modelo utilizado en los colegios con los ecocomedores, «pero a mayor escala». Vanoostende concluyó que se relaciona directamente al productor con los comedores escolares, «de forma que el productor puede planificar sus cosechas conociendo de antemano las cantidades y el precio que percibirá durante todo el año».

«Si queremos vivir en un mundo sostenible, tenemos que cambiar nuestros modos y costumbres»

Por su parte, la rectora de la Universidad de La Laguna, Rosa Aguilar, señaló que desde la Institución educativa están trabajando sobre cómo mejorar la salud con un modelo sano y sostenible desde la investigación y docencia. La rectora destacó la importancia del producto local para estructurar una economía social, así como abordar los problemas desde un punto de vista multidisciplinar. Así, subrayó que «si queremos vivir en un mundo sostenible, tenemos que cambiar nuestros modos y costumbres, y la forma de alimentarnos y acercarnos a lo local es fundamental».

La rectora desglosó cuál va a ser la participación del centro académico en este proyecto: se pretende definir un sistema de información geográfico para cartografiar la situación de los productores y determinar la estructura de sus costes de producción, analizar los hábitos alimenticios y preferencias de los comensales y desarrollar una herramienta de cálculo de aporte nutricional de los menús. Igualmente, se va a implementar un proyecto piloto de ecocomedor en las instalaciones de la Universidad de La Laguna y desarrollar una campaña gráfica sobre la experiencia, así como acompañar el proceso de redacción de pliegos de contratación pública con cláusulas ambientales, nutricionales y sociales.

Buscándome las Habichuelas

El director de Cáritas Diocesana de Tenerife,  Juan Roghoni Escanio, recordó el compromiso de su organización con la agricultura ecológica desde el punto de vista de la formación y la inclusión. En este sentido, destacó la creación de Buscándome las Habichuelas que impulsa la economía social. «Esta empresa de inserción colabora con este proyecto a través de la logística, poniendo en contacto al agricultor con el consumidor», subrayó.

El objetivo de este ambicioso proyecto se centra en que en 2023 se pueda pasar de los 51 ecocomedores actuales a los 477, aumentar de 102 productores ecológicos hasta los 816, poder cultivar 1115 hectáreas en ecológico de las 155 que existen en la actualidad y de 11 000 llegar a 80 000 comensales.  El proyecto comenzará con tres prototipos pilotos en comedores universitarios y escolares que servirá de modelo para extrapolar la experiencia al resto de comedores públicos del Archipiélago. Participan también organizaciones agrarias como Coag Canarias.