Danza contemporánea – Periodismo ULL https://periodismo01.ull.es Diario digital de la Universidad de La Laguna Sun, 05 May 2024 00:46:48 +0000 es hourly 1 https://wordpress.org/?v=6.6.1 https://periodismo01.ull.es/wp-content/uploads/2016/04/cropped-PULL_Redondo-1-32x32.png Danza contemporánea – Periodismo ULL https://periodismo01.ull.es 32 32 Steam Room, al ritmo de giros eternos https://periodismo01.ull.es/steam-room-al-ritmo-de-giros-eternos/ Sun, 05 May 2024 06:58:56 +0000 https://periodismo.ull.es/?p=291307 Steam Room se hizo con el público del Paraninfo de la Universidad de La Laguna el pasado viernes, 3 de mayo, en la presentación de la última parte de su trilogía de danza titulada DragOn Forever. Esta actuación fue la primera que el pueblo tinerfeño pudo disfrutar ya terminada y pulida, pues hace cosa de año y medio, presentaron este mismo acto en proceso en la capital, y era ahora cuando por fin, regalarían a la audiencia la obra finalizada, perfeccionada y con un fin claro: acabar con la trilogía.

20.11 horas. Comenzamos a entrar a un paso rápido y decidido. Por primera vez, el público se adentró en un concepto totalmente nuevo, el escenario. Comenzaron a subir, creando un perfecto giro alrededor de todas las sillas dispuestas rodeando al conjunto que ya se encontraba en escena. La gente creía que se sentaría donde siempre, separados del proscenio, pero no, surgió algo que en cine suelen ejemplificarlo como la rotura de la cuarta pared. Algo parecido, pues tenía pinceladas distintas. Habían roto con cualquier distinción y quienes entraron fueron parte de la coreografía y de la escena.

El grupo de baile caminaba al compás de una música alternativa mientras cada persona encontraba su lugar para disfrutar de la pieza. Steam Room, vestidos con telas finas de color verde, buscaban hacer contacto visual con cada persona allí sentada. Sus pupilas, encharcadas de negro, propiciaban cierta inquietud. Pese a ello, esbozaban fuertes sonrisas al público que se encontraba atónito. Aunque las vueltas que daban parecían sin sentido, el camino estaba perfectamente trazado y los movimientos estaban completamente compenetrados. Todo esto, rodeando los espacios delimitados por el público. Aquello era una obra 360 grados.

Artistas al inicio del espectáculo caminando alrededor del público. Foto: B. Viera.

«Qué fuerza transmiten»


El salón estaba lleno de caras de asombro y de intriga. Las luces que ambientaban la escena parecían imitar a la estrella de Belén en el mito bíblico, pues guiaban el sentido de los pasos del grupo y allá donde la luz apuntase, se movían. Los comentarios no cesaban y el público estaba atónito: «Qué fuerza transmiten». Cualquiera podía creerse capaz de realizar esos movimientos, reflejándose en las piernas que golpeaban una y otra vez los asientos, mostrando el ansia de la gente por unirse al espectáculo.

Las cabezas asentían al son de la música y los cuerpos se movían al compás de esta. Surge otro cambio de música, esta vez más animada. Ya la corporación de baile no caminaba, corría rítmicamente. Movían los brazos enérgicamente desde la cabeza hasta los pies. No hacía falta nada más para sacarle una sonrisa al público. El clima recordaba a la libertad, transportando incluso a lo tribal. Las expresiones faciales lo expresaban todo.

Tercer cambio de música. Mucha técnica reflejada en movimientos simples cargados de coordinación y actitud que bastaban para reflejar el espíritu antielitista del conjunto artístico. Se lleva la atención una mujer que cargaba un bebé en brazos al que zarandeaba al ritmo de la música. Una vez más, un acercamiento explícito del público. La reacción era común y las ganas de bailar afloraban en cualquiera. De un momento a otro la escena se quedó sin luz, los movimientos eran cada vez más lentos y el espacio se llenó de intimidad.

21.00 horas. El conjunto comenzó a quitarse la ropa hasta quedar cubiertos por una fina tela que solo tapaba las partes más privadas de cada integrante. A distintos ritmos, se fueron deshaciendo de la ropa y todo se tornó en algo más oscuro y fugaz. Las expresiones cambiaron. Todo se volvió más serio. Nadie se esperó aquello. El silencio era cortante y solo se escuchaban los suspiros del público sorprendido.

Steam Room tras quitarse el vestuario. Foto: B. Viera.

«Pensé que terminarían sacándonos a bailar»


Entre los giros que trazaban en sí mismos y alrededor del escenario, se escuchan unos aplausos suaves pero con seguridad. Todas las personas voltean la vista a una señora en silla de ruedas que no puede contener el entusiasmo y aplaude ensimismada. Las demás la siguen y todo se envuelve en una competición de aplausos a la danza que presenciaban. La escena se llenó de humo y aplausos pero de repente la luz se apaga. Sus cuerpos se paran.

21.21 horas. La obra finaliza. La gente se pone de pie. Aplauden. Gritan. Silban sin parar al conjunto que yace sobre el suelo tapizado del escenario. «Dios qué maravilla», se escuchó. Steam Room desapareció de la escena y el público no se lo pensó dos veces. Se veían capaces, aquello les había hecho sentirse así. Se levantaron y comenzaron a bailar sin ningún tipo de pudor. «Pensé que terminarían sacándonos a bailar», comentó alguien allí presente. Entre giros eternos, la compañía puso fin a esta trilogía con su espectáculo DragOn Forever.

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«La técnica es algo muy secundario a lo que es el alma de quien baila» https://periodismo01.ull.es/la-tecnica-es-algo-muy-secundario-a-lo-que-es-el-alma-de-quien-baila/ Mon, 30 May 2022 13:00:10 +0000 https://periodismo.ull.es/?p=210154

«No es lo que otras personas hacen, sino lo que haces tú mismo. El proceso de llegar a conocerte»


Salvador Rodríguez es estudiante de segundo del Título de Grado de Arte Dramático en la Escuela de Actores de Canarias, en Santa Cruz, y Míster Verano Tenerife 2020, a quien le apasiona el ámbito de la interpretación y la danza. Sufrió una etapa de acoso escolar, desde quinto de Primaria hasta tercero de Secundaria, en la que tomó la decisión de cambiar de colegio. Su ingreso en el Bachillerato de Artes del instituto La Laboral supuso el descubrimiento de un espacio plural y abierto a la libertad de expresión, lo que favoreció su identidad y autoestima.

El joven introvertido y sin ganas de participar en nada, debido al bullying, se transformó en una persona «super energética, animada, divertida, espontánea y creativa», según se define en la actualidad. El mundo escénico le motivó a continuar sus estudios superiores como actor y bailarín y a valorar su potencial: «Sin el arte yo no hubiese sido como soy ahora». Y asegura que, en ocasiones, duda de sus capacidades, pero que trata de divertirse en el proceso.

El programa Musical.IES, dirigido por el Auditorio de Tenerife con el fin de preparar a la juventud en actuación, canto y danza, avivó sus ganas de convertirse en un profesional de las artes escénicas. Salvador Rodríguez siempre explica que «fue una experiencia que nunca podrá olvidar, y que recomendaría a todo el mundo. Es trabajo en equipo, ensayos, esfuerzo continuo y diario».

Salvador Rodríguez aspira a ser cómico de cine. Foto: L. Rodríguez

Su preparación como bailarín comenzó con el popping y waving, pertenecientes al estilo urbano o funk styles, lo que él considera «sus raíces» y lo que más le gusta practicar y perfeccionar. Se declara partidario de probar el mayor número de modalidades de baile posible: «Hice funk, hiphop, luego también me apunté a claqué, luego a ballet, contemporáneo, salsa, bachata, merengue… Hice de todo. Incluso en la escuela llegué a hacer danza aérea».

El artista teguestero canaliza sus sentimientos a través de coreografías. Su visión es sensible y humana, puesto que para él «la técnica es algo muy secundario a lo que es el alma de quien baila. Si no tienes alma, lo pierdes todo». Se ha dedicado más al contemporáneo, pues afirma que «es un estilo propio, de taparme los ojos y bailar. Y sentir el baile».

Hay días en los que, como actor, no encuentra ideas para abordar sus personajes. Recurre entonces a la improvisación. «En el clown es básicamente jugar. No vas a sacar esa parte de ti pensándolo, sino jugándolo. Y las cosas que vayan saliendo las vas metiendo en escena. Cuando no tienes inspiración, te vendrá en el juego», expresa el actor.

«Quien se pone el obstáculo eres tú mismo»


Salvador Rodríguez se manifiesta afortunado por contar con el apoyo total de su familia. «Incluso mi madre se emocionó. Es para mí una inspiración porque ella fue gimnasta y bailarina de ballet. Cuando yo le dije que quería ser bailarín [y actor], vi un brillo en sus ojos», subraya. Sus perspectivas de futuro lo trasladan a destinos como Estados Unidos o Madrid por la amplia oferta de audiciones. Y aspira a trabajar en la industria del cine, aunque le conmueva el teatro.

«Entré a estudiar porque quería ser actor de cine, sin duda. Muchos de mis referentes como: Adam Sandler, Jack Black y el gran Jim Carrey son actores de comedia espectaculares. Yo quiero ser como ellos, son una gran inspiración», argumenta con ilusión, pues prefiere las posibilidades que le ofrece la actuación ante las cámaras.

El consejo que da, como alumno de Arte Dramático, para las personas que quieran vivir de la interpretación es que «luchen por lo que quieren, que no se rindan. Y si quieren hacer teatro, que lo luchen hasta el final y no paren. Porque los sueños se consiguen si tú los persigues». Nació con el don del arte innato y lo demuestra a diario en su vida.

 

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«La disciplina es la base para un buen desarrollo profesional» https://periodismo01.ull.es/la-disciplina-es-la-base-para-un-buen-desarrollo-profesional/ Thu, 28 Apr 2022 07:00:38 +0000 https://periodismo.ull.es/?p=205864 https://periodismo.ull.es/wp-content/uploads/2022/04/AUDIO-ALICIA-.m4a

«En mi municipio se preocupan muchísimo por la cultura»

Alicia Hernández Butragueño es una joven isorana bailarina y coreógrafa. Lleva en este mundo desde que tiene memoria, primero formándose en la escuela de su municipio y ahora enseñando danzas urbanas en el grupo OneDance. Como artista, se mueve en diferentes registros: danza contemporánea, clásica y pole dance. También ha participado en diversos campeonatos y en el programa Got Talent España 2016. En definitiva, toda una promesa del panorama cultural de las Islas.

Siempre lo ha tenido claro: «Era tan feliz bailando que por qué no dar un paso más allá y probar a dedicarme a ello». Comenzó en la escuela de Ocio y Tiempo Libre de Guía de Isora en 2006, pero su pasión por la danza había empezado tiempo antes. Tuvo la suerte de contar con el apoyo incondicional de sus familiares para poder formarse como bailarina profesional desde muy temprana edad.

Alicia Hernández disfruta bailando sola, es su forma de actuar preferida. Sin embargo, reconoce que preparase en equipo es muy enriquecedor. En el mundo de la danza, estar en un grupo es sinónimo de compromiso y entrega total. Como ella misma dice: «Aprendes a trabajar con otros cuerpos, ves cualidades que a lo mejor no tienes y eso te ayuda a indagar un poco más en tu patrón de movimiento».

«Adoro actuar sola porque siempre he sido muy independiente»


La coreógrafa considera que la disciplina es la principal cualidad que debe tener cualquier profesional de la danza. El baile requiere mucho tiempo, dedicación, esfuerzo, sacrificio… Todo eso sería imposible sin la disciplina como pilar fundamental. Hernández asegura que «esta debe ser la base de todo objetivo, no solo en esta profesión».

Ser tan versátil ha permitido que Alicia Hernández haya contado con grandes oportunidades durante estos años. Sin embargo, si tiene que decidirse por un estilo no duda en escoger la disciplina contemporánea. Acostumbrada a aplicar mucha fuerza muscular, descubrió un género sin normas ni patrones de movimiento. «Aprendí a bailar distinto, a disfrutar cada movimiento y a disfrutar la danza», afirma.

Hernández durante una actuación en el festival Cuadernos Escénicos. Foto: PULL

No solo disfruta bailando. La joven también es fundadora y coreógrafa del grupo XXONEgeneration. Ella considera que la danza permite al alumnado conocerse física y mentalmente. Por eso enseña en sus clases cómo utilizar el cuerpo para evitar lesiones y bailar de manera saludable. Alicia Hernández señala que «lo más importante es aprender a mostrar sentimientos específicos con ejercicios en grupo o individuales».

Aunque la bailarina ama su profesión, cree que aún queda mucho que trabajar en el ámbito del arte en general. No obstante, Canarias es una de las regiones que más apoya la danza con festivales como DanzaTTack, MasDanza y Cuadernos Escénicos. Además, agradece al Teatro Victoria por ser uno de los principales centros de formación para artistas de la tierra. «No me olvido de Roberto Torres, bailarín y coreógrafo, como gran impulsor de la profesión en las Islas», concluye Hernández.

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Acerina Amador: «He tenido la suerte de trabajar con artistas que admiraba» https://periodismo01.ull.es/acerina-amador-he-tenido-la-suerte-de-trabajar-con-artistas-que-admiraba/ Mon, 25 May 2020 10:31:33 +0000 http://periodismo.ull.es/?p=137384 Acerina Amador es una joven coreógrafa y bailarina tinerfeña dedicada a la danza contemporánea, a la que define como «la postmodernidad que se remonta al siglo XIX como una respuesta al ballet clásico que tuvo luego importantes desarrollos en Alemania y Nueva York donde se fue deconstruyendo el movimiento». La artista compagina esta actividad con otro ámbito en el que se ha formado y también trabaja: la psicología. Actualmente es coordinadora, supervisora clínica y docente del Experto en Terapias Contextuales en la Universidad de la Laguna. 

Se inició en el mundo artístico desde muy pequeña. Siempre había soñado con ello y a los 16 años lo «vio más claro», aunque no fue hasta los 18 años cuando finalmente convirtió la danza en un proyecto de vida en el que no ha parado de trabajar.

Su carrera comenzó en Tenerife. Se formó en el Teatro Victoria, que se encuentra en la capital de la Isla y desde ahí no ha parado: ha visitado ciudades como Berlín, Barcelona y Nueva York para seguir formándose. En Estados Unidos, tuvo la oportunidad de trabajar con la actriz Fiona Graham, entre otros muchos personajes de prestigio a los que la bailarina admira.

Formación internacional


Además, ha tenido la oportunidad de estar en el Conservatorio The Neighborhood y The Susan Batson Studio. Incluso con todos estos logros a su espalda, Amador asegura que no tiene «una gran carrera». «Diría que he tenido la suerte de trabajar con artistas que admiraba y crear mis propios proyectos», declara. Lo mejor de todo, según expone, han sido las «experiencias transformadoras de percepción de la realidad».

La bailarina ha tenido la oportunidad de presentar su obra titulada Refugio, el 14 de junio del año 2018. Una obra que gira en torno a la temática «humano-no humano». Otro trabajo a destacar es el espectáculo de danza contemporánea que ofreció junto a Mariana Tengner titulado Zoom in and close up, donde se crea un retrato intimista mediante una coreografía con la que se expresan inseguridades, inquietudes, entre otras emociones.

«Tengo una vida muy rica gracias a la danza y la psicología»


Al compaginar la danza contemporánea y la psicología Acerina Amador afirma que vive «una vida muy rica», puesto que los dos aspectos le interesan mucho. De ambos ha aprendido la lección de que lo más importante son las relaciones personales, que cuentan más que el talento, como en casi todas las profesiones, por lo que considera fundamental cuidarlas. 

Por último, la artista no duda ni un segundo en pedirle a los jóvenes que se van a iniciar en el mundo de la danza que «vayan al gimnasio para fortalecer musculatura y evitar lesiones, que racionen las horas bailando y que lean mucha filosofía y pensamiento contemporáneo». Un consejo con el que anima a todo el mundo a interesarse por estos ámbitos que para ella son tan especiales. 

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Cine y danza se mimetizan en La Orotava https://periodismo01.ull.es/cine-y-danza-se-mimetizan-en-la-orotava/ Thu, 14 Nov 2019 16:55:56 +0000 http://periodismo.ull.es/?p=114085 Producir sensaciones es la función más efectiva que puede tener una historia. Se inyectan en el espectador y hacen que vuelva para revivirlas una y otra vez. El celuloide es el arte más certero a la hora de producir sensaciones. Una maquinaria se dedica a aislar al receptor y que las reciba sin que tenga que realizar ningún esfuerzo. El proyecto Enlazados coronó el último día fuera de concurso del Festival de cortos de La Orotava con siete de estas historias. Participaron en Danzattack, Festival Internacional de CineDanza, en octubre. En todas, el baile sustituía a las palabras.

Abrió el segundo clasificado, 4~, obra de Rodrigo Campos-Rocha. Relata cómo dos mujeres se someten a una instrucción de baile estricta y desconcertante. Poco a poco esas clases marcan la manera en que se comporta la una con la otra. Una música penetrante acompaña el relato y consigue que el espectador comparta la opresión de las protagonistas. La ausencia de color y el ambiente turbio recuerdan a otras películas introspectivas como Persona, de Bergman.

En Inside inhabited Landscape, la granadina Carmen Porras muestra las preocupaciones de sus protagonistas. Los bailes que interpretan, siempre actores en soledad, muestran situaciones vitales, como un parto. Está rodado íntegramente en parajes naturales. Los efectos de sonido contagian esa atmósfera al espectador. La fotografía exquisita y el contraste de colores que forman los personajes y el paisaje aseguran la imagen atractiva.

Náufragos de interior es la única producción Canaria de la noche. Ganó el Premio Canarias de CineDanza en el Festival Danzattack. Cristina Gámez retrata, a través de los movimientos del cuerpo, la vida cotidiana en una casa adinerada de principios del siglo XX. Refleja la soledad y el cautiverio que sufrían las mujeres durante esa época, tanto las criadas como la señora de la casa. Está rodada íntegramente en el casco histórico de La Laguna.

La danza para expresar emociones


Thomas Friendluch dirige Cold Storage. Un señor vive en un las montañas, en un paraje inhóspito y frío. Rompe su monotonía al encontrarse un cuerpo bajo el hielo. El baile se convierte en la máxima expresión de alegría cuando advierte que ese cuerpo pondrá fin a sus días de soledad.

En Intangout, de Vito Alfarano, un presidiario imagina cómo sería su vida su fuera de la cárcel. Deplora que sus seres queridos bailen y se diviertan mientras él continúa recluido. El tango manifiesta la nostalgia del protagonista. También se convierte en el lenguaje que utiliza el resto de personajes para comunicarse.

La coreografía más concurrida aparece en Mass, en la que Fu Les dirige tanto la imagen como la danza. El baile sirve como medio de protesta. Un grupo de personas se organiza y reclama sus derechos al unísono.

Cerró la noche Rito, corto ganador del festival CineDanza. Asun Noales y Sebastián Rowinski escenificaron un ritual místico rodeados de cien cabezas de jaguar. Es un proyecto de la propia coreógrafa Asun junto a Susana Guerrero, encargada de recrear la atmósfera mitológica, que recuerda a México o Grecia.

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‘Cuadernos Escénicos’, entre el 17 y 22 de julio en Garachico https://periodismo01.ull.es/cuadernos-escenicos-entre-el-17-y-22-de-julio-en-garachico/ Mon, 16 Jul 2018 16:00:20 +0000 http://periodismo.ull.es/?p=73898 La oferta cultural ‘Cuadernos Escénicos’ celebra su séptima edición, desde el jueves 17 hasta el sábado 22 de julio, en la localidad norteña de la Villa y Puerto de Garachico. Se trata de una programación artística que llenará de vida los principales puntos de interés del municipio gracias a la danza contemporánea, tales como la Plaza de la Libertad o la Glorieta de San Francisco. Daniel Abreu, al frente de la propuesta formativa para este año.

El pistoletazo de salida de este evento, que se ha consolidado como uno de los actos punteros en el Archipiélago, arrancará el jueves 19 a las 19.30 horas en la Plaza de la Libertad. A partir de entonces, multitud de exposiciones, actuaciones en vivo y talleres se desarrollarán en el marco de esta oferta cultural.

En este último punto destaca la participación del reciente ganador de los Premios Max de las Artes Escénicas, Daniel Abreu, que encabezará el Festival gracias al desarrollo de un taller coreográfico desde el 16 al 20 de julio. El artista natural de Tenerife tratará de realizar una búsqueda para realizar una creación, desde lo individual a lo grupal. En paralelo, también se impartirán clases de yoga o la posibilidad de tomar clases de danza africana senegalesa y congoleña.

Asimismo, el evento prevé la organización de una serie de actividades complementarias que redondeará la nutrida oferta cultural del fin de semana. En primer lugar, una exposición de Patri Cámpora, del 20 al 23 de julio, en la Casa de Piedra del municipio. Y en segundo lugar, una representación infantil para los más pequeños durante la jornada del viernes. Los cuentos, la danza y la música serán los grandes protagonistas de la sesión.

El acto de clausura, previsto para el domingo 22 de julio, despedirá la séptima edición de ‘Cuadernos Escénicos’ a las 19.00 horas en la Glorieta de San Francisco. Allí, tanto agrupaciones locales como foráneas cerrarán este evento y darán paso a una breve extensión que tendrá lugar, el mismo día a las 19.30, en la localidad de Guía de Isora, que contará con las representaciones, entre otras, de las compañías D’Click y Diego Sinniger.

«Una muestra que relaciona la danza contemporánea con el espacio público»


Desde la organización del evento apuntan que «nuestra inquietud es potenciar la danza en todos sus aspectos y generar vida artística en los rincones del municipio», de forma que la riqueza arquitectónica con la que cuenta pueda fomentar «el acercamiento del público». Asimismo, afirman que ‘Cuadernos Escénicos’ es «una muestra que relaciona la danza contemporánea con el espacio público», y que convierte a Garachico en «un escenario donde el baile y el pueblo potencian su valor».

Debemos recordar que este acto, ‘Cuadernos Escénicos’, se encuentra integrado y es miembro de la ‘Red de Festivales de danza contemporánea en espacios no convencionales’, ACIELOABIERTO.

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