La Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación de la Universidad de La Laguna (ULL) acogió las II Jornadas de Periodismo este martes, 25 de octubre. El acontecimiento se centró en la información meteorológica y el cambio climático. La actividad, presentada por el decano de la Facultad, José Antonio Batista, y el administrador único de la RTVC, Francisco Moreno, estuvo dirigida por el profesor de Periodismo de la ULL José Luis Zurita y Nieves Rocha, responsable del área de Responsabilidad Social Corporativa de Radio Televisión Canaria. 

El acto comenzó a las 9.30 horas con una master class impartida por Vicky Palma, jefa de Meteorología de RTVC y Nuria Seró, presentadora y meteoróloga de TVE. En ella se dieron aspectos claves de cómo se realiza la información meteorológica, diferencias que pueden llevar a confusiones y cómo se traduce todos los datos recabados para que la audiencia pueda entender con claridad sobre lo que se está hablando.

En primer lugar, Palma aclaró que, aunque ambas van de la mano, climatología y meteorología no son lo mismo, haciendo hincapié en que las noticias de este tipo están respaldadas por la ciencia. Además, recalcó que en las Islas es más complicado predecir qué ocurrirá «debido a los grandes cambios que sufrimos». Así, afirmó que «en Canarias cuando más te alejas de los días, peor va a ser la predicción y más incertidumbre va a haber».

Nuria Seró: «Lo más importante es cómo es la atmósfera, hay que mirar sus capas y qué sucede en ellas»

Seró, por su parte, explicó qué cosas se deben observar para poder hacer predicciones lo más acertadas posibles. Para ello, dijo, «nos debemos centrar en todas las capas de la atmósfera, mirar bien qué ocurre en cada una de ellas, mediante distintos modelos meteorológicos y distintas variables para mirar todo con mucho más detalle». Luego, añadió, «transmitimos todos esos datos de una manera entendible mediante colores, según del fenómeno y su intensidad, y símbolos». 

Gracias a esos modelos, la presentadora de TVE destacó que con los distintos modelos se pueden ver todas las variables: «Se mira la nubosidad y las precipitaciones, las rachas de viento y de dónde vienen, también permite ver el oleaje y la calima en el caso de que el viento venga del este».

Las dos profesionales destacaron que es imposible hacer predicciones muy  concretas, «ya que no es una ciencia exacta, pero sí intentamos acercarnos a un nivel de acierto muy alto», subrayó Seró. 

Por último, después de que ambas contestasen a unas preguntas por parte del público asistente, Vicky Palma volvió a tomar la palabra para ejemplificar cómo muchos medios cometen fallos a la hora de interpretar las predicciones de la AEMET (Agencia Estatal de Meteorología), para después realizar sus propias noticias. «Estos errores son especialmente notorios con los porcentajes y los nombres que reciben», señaló.

Finalizó su intervención explicando la diferencia entre una predicción, que son datos en general, y aviso, que informa de un riesgo.

Trabajo realizado en colaboración con Nieves Santana, quien realizó el vídeo.

Se ha estrenado una nueva entrega de Los Misterios de Laura. ¿Cómo se enteró de este regreso? ¿Qué sensaciones le provocó? «Me llamaron por teléfono y me dijeron que íbamos a hacer un capítulo especial y me puse muy contenta. Me pareció muy sorprendente después de tantos años. Se puso todo en marcha, rodamos desde septiembre, durante 13 días y por fin la hemos estrenado, así que mucha felicidad. Nos reunimos todo el equipo, nos volvimos a encontrar, trabajamos muy felices y es una alegría muy grande que el público vuelva a ver a Laura en acción. Creo que el resultado ha sido bueno, es un capítulo muy divertido, donde a través del crimen los espectadores descubrirán qué le ha pasado a los personajes en todo este tiempo. Creo que ha quedado un reencuentro con el público muy bonito». 

Bueno, de unos años hasta ahora, las productoras se han decantado por rescatar series y hacer nuevas temporadas. ¿En algún momento se había imaginado que la inspectora Lebrel regresaría a la televisión? «No me esperaba el regreso de la serie, más que nada por el paso del tiempo. La serie se dejó de emitir en 2014 y como han pasado tantos años no lo había llegado a pensar. No estaba en mi mente, pero estoy muy satisfecha con este regreso». 

Gran parte del elenco de la serie como Beatriz Carvajal, César Camino, Laura Pamplona, se suman también al regreso. ¿Cómo ha sido el reencuentro con sus compañeros y compañeras? «Ha sido muy bonito, nos pusimos muy contentos con Beatriz Carvajal, Laura Pamplona, Oriol Tarrasón y César Camino. Fue una alegría grande, compartimos 13 días de rodaje y muy, muy contentos de estar otra vez unidos y con el resultado de este telefilm. Tuvimos un equipo técnico maravilloso que facilitó bastante las cosas y un director estupendo, Pablo Guerrero. Por tanto, estamos muy ilusionados de que el público vea el estreno y les guste tanto como a nosotros». 

Este reencuentro deja las puertas entreabiertas a una nueva temporada. ¿Le gustaría que sucediese? «Me encantaría, como no me va a gustar, estaría encantada. Si es verdad que los designios del señor son inescrutables. Ja, ja, ja… No sabemos de qué depende la renovación, pero ojalá esto traiga consigo más entregas y sobre todo, más misterios que resolver».

Además de Los Misterios de Laura, hace muy poco tiempo ha estrenado Venga Juan y una obra de teatro junto con Ana Rujas, De un tiempo a esta parte… Fracaso. ¿Qué significan estos proyectos para usted? «Significan lo primero de todo, trabajo, que parece una tontería pero no lo es, porque no siempre es así. Son proyectos que me gustan, me apasionan, me interesan y que los disfruto muchísimo. Luego significan mucho estudio, muchas horas de concentración y de energía, eso es entregarte a tu pasión. Todo eso significa que estás en activo. Considero que lo peor que le puede pasar a un actor es estar parado mucho tiempo, más que por no tener trabajo, por no ejercitar tu herramienta. He tenido una buena racha, un buen momento y la verdad que muy agradecida a la vida por estos trabajos». 

¿Tiene proyectos futuros a la vista? «Tengo proyectos futuros, pero aún no puedo decir nada, no me han dado permiso. Pero bueno, eso quiere decir que algo más hay, creo que en este 2022 habrá mucho trabajo».

Dicho espectáculo ha surgido de la decisión de Omer Pardillo Cid, albacea y productor general de la difunta cantante, quien pensó en ella para reencarnar a la figura más importante de la historia musical, debido a la íntima amistad que ambas guardaban. Celia también fue su maestra, siendo la humildad y la profesionalidad los pilares que marcarían la enseñanza de Lucrecia.

Desde bien niña, la artista cubana sabía que quería dedicarse al mundo del arte. Comenzó sus estudios musicales en el Instituto Superior de Arte de Cuba, donde se licenció en la modalidad de piano. Tras esto, ingresó en la orquesta femenina Anacaona como directora vocal y arreglista y, en muy poco tiempo, se consolidó como una de las mejores cantantes de su país. Asimismo, ha compuesto numerosas bandas sonoras para películas de renombre, como Balseros, dirigida por Carles Bosch y Josep María Domenech, que fue nominada al premio Oscar en 2003.

Su faceta como actriz

No obstante, la faceta musical no ha sido la única en desarrollarse a lo largo de su vida. Lucrecia también ha trabajado como actriz en films como Ataque verbal junto a otras actrices españolas de gran importancia como Adriana Ozores y Antonia San Juan. Su director, Miguel Albadalejo, consiguió el premio Goya a Mejor Director en 1999. 

La cantante acudía con frecuencia a España con sus giras y decidió instalarse en Barcelona en 1993, donde reside actualmente. Pronto los más pequeños de la casa tampoco olvidarían su voz y su nombre, pues este traslado le permitió trabajar como presentadora de la famosa serie infantil española Los Lunnis, producida por TVE durante siete años. En esta última etapa sacó a la luz su lado más pueril, escribiendo varios cuentos como Besitos de chocolate, El valle de la ternura (2005) y Todos los colores del mundo (2008). Además, lanzó un disco para niños llamado La Casita de Lucrecia (2010).

Como era de esperar, la estrecha relación entre nuestra tierra y la música latina llamó la atención de Lucrecia. La multifacética artista destaca sus innumerables actuaciones en las Islas y su gran amistad con Javier Zerolo y su emisora Mega Latina, en la que colaboró durante muchos años. “Canarias es una de mis plazas más importantes de concierto por su amable y entregado público”, afirma la autora.

La cantante, en este último paso por Tenerife, espera que sea un evento memorable y desea que la isla “explote de música y alegría”. Para ella, es imposible no recordar a su amiga y mentora en los escenarios, sobre todo en fechas tan cercanas a la época de Carnavales. “Si pudiera volver a hablar con ella, le diría: Celia, gracias por tu grandeza y generosidad… Te quiero mucho”, confiesa Lucrecia.

Su trayectoria en el periodismo y, especialmente, en el reporterismo es muy distentida ¿Por qué decidió tomar este camino?: “Quería conectar el mundo exterior con el interior en una España que, por aquel entonces, era muy cerrada.  Siempre quise dedicarme al reporterismo de calle e internacional, porque lo que me interesa es la gente y lo que le pasa. Creo que viajando es la mejor forma de instruirse y realmente aprendemos de lo que es diferente».

¿Nunca se vio en una redacción? «Lo cierto es que no. Estuve inicialmente en una, ya que fui corresponsal a partir de 1983. Nunca hice informativos diarios, que sería la idea convencional que se tiene. Siempre participé en programas, por lo que estaba en continuo movimiento, en la calle, o viajando».

Riesgos de la comunicación en la actualidad

¿Cómo valora la situación del Periodismo ahora mismo? «Muy mal. Esta profesión nunca lo ha tenido fácil, pero es verdad que, en este momento, tenemos muchos frentes. Por una parte, la crisis económica. Por otra, la crisis de valores, donde se priorizan una serie de noticias que tienen muy poco que ver con las personas y reflejan determinados intereses y grupos».

¿A qué puede deberse? «Creo que está muy a merced de lo que ya viene ocurriendo hace tiempo: nuestro empleo se está convirtiendo en un entretenimiento y no en información. Se corre el riesgo de que la ciudadanía crea que está al tanto de las cosas  cuando realmente está entretenida. De hecho, los grandes temas no están presentes en los medios de comunicación. La tecnología, por ejemplo, puede ser un gran problema; tiene un trasfondo negativo si se usa incorrectamente».

¿Qué efecto negativo podría producir? “Es algo muy peligroso para la construcción social porque realmente lo que se está haciendo es erigir burbujas ideológicas. La comunidad cree que toma decisiones basadas en el entendimiento de los hechos cuando, en realidad, solo tiene consciencia de una parte de ellos o unos hechos que están manipulados, que son falsos”.

¿Existirá alguna solución para este problema? “Ojalá tuviera una fórmula, pero lo que creo que es necesario es la educación. Todo se basa en que la sociedad, cuanto más educada esté, mejor. Con esto no me refiero a solo académicamente, sino también en el manejo de la información y que se dé cuenta de cómo se produce la misma y de que todo mensaje es enviado por alguien con algún fin. Muchas veces puede ser legítimo, pero otras no. Ese trabajo de criba, de hacer un esfuerzo por conocer bien lo que hay a su alrededor, es algo que hay que conseguir que cale ya que, de lo contrario, existe el riesgo de que las decisiones que se tomen vayan en contra de sus necesidades y únicamente a favor de los intereses de unos pocos”.

«No hemos logrado la paridad»

¿Cree que es complicado ‘informar en tiempos de posverdad’? “Comunicar consiste en contar aquello que no se quiere que se vea, contar lo invisible y lo que se calla. Ahora, a esa dificultad básica de tener que luchar contra unos intereses que prefieren que las cosas no se sepan, tienes la tecnología, que podría jugar a tu favor porque es una herramienta para contrastar y desenmascarar la mentira. Sin embargo, si en vez de usarla como herramienta positiva la usamos como algo negativo, propagaremos los errores, propiciaremos los lenguajes de odio. Es cada vez más complicado, puesto que más comúnmente los enemigos son más poderosos”.

¿Cómo valoraría la situación de la mujer en estos momentos dentro de los medios de comunicación? “Ha avanzado mucho. Cuando yo empecé éramos cuatro y, realmente, en cantidad y acceso a puestos de trabajo, es obvio que hemos mejorado muchísimo en nuestro entorno puesto que hay muchas más mujeres que hombres en las redacciones, las universidades, etc. Sin embargo, no hemos logrado para nada la paridad; ni siquiera el espacio proporcional que merecemos como la mitad de la población que somos, en lugares de opinión y de dirección. Eso es claramente un déficit y algo por lo que hay que pelear”.

¿Entraría en juego así la lucha feminista? “Efectivamente. En ella, lo primero que hay que hacer es desenmascarar a aquellos que mienten sobre la emancipación femenina. No es una pelea contra nadie, sino que es a favor de todos. Una sociedad funcionaría mejor si contara con todos sus miembros, no solo con la mitad o menos de la mitad. Sin duda, nosotras tenemos un papel muchísimo mayor del que se ha tenido nunca en nuestros entornos, pero para nada el que nos correspondería”.

¿Cree que estamos ante una nueva ola del feminismo? «En este momento es verdad que hay una propulsión feminista y que se integra en el debate público. Yo confío en que esto no se frene y siga consolidándose y que no nos obliguen a que se convierta en algo pasajero. Hay que conseguir que todo esto se concrete en acciones y en cambios de mentalidad. Tenemos una legislación que se puede mejorar en muchos aspectos, pero, sobre todo, hay que insistir en la educación en igualdad».

«Admiro profundamente que mis excompañeros se realicen los Viernes Negros»

¿Cuál es su postura ante las reivindicaciones de los Viernes Negros de RTVE? “Estoy totalmente de acuerdo. En diversos actos en los que he participado, como la lectura de los candidatos de los Premios Princesa de Asturias, de los que soy jurado, aproveché que iba a salir en televisión y me vestí de negro. Admiro profundamente que mis excompañeros, los cuales están en activo, realicen esta iniciativa. Creo que ha tenido un impacto. Es un ejemplo de resistencia como sociedad civil, puesto que, si no nos rebelamos desde abajo, no nos van a regalar nada. Los derechos se consiguen desde abajo, nunca vienen dados desde arriba”.

¿Qué le ha parecido su participación en el II Congreso de Periodismo histórico? “La verdad es que muy interesante. Lo que me resulta más atrayente es toda la parte histórica que han contado de la presencia del periodismo en las Islas. La única cosa que he lamentado es la falta de presencia de alumnos. Eso significa que entre los jóvenes y el estamento universitario no existe la principal característica que los debería definir, que es la curiosidad más absoluta. No solo te tienes que convertir en un buen lo que sea que estés estudiando, tienes que convertirte además en una persona que entiende el mundo. Me voy con mucha pena de ver que realmente, aunque no es el único caso, existe muy poca curiosidad entre los estudiantes”.

¿Qué consejo le daría los estudiantes de Periodismo? “Lo importante es saber que esto es un oficio que es mucho más que eso. Es todo un compromiso social. Hay que tener totalmente claro que hay una responsabilidad. Tienes en tus manos un bien extraordinariamente frágil, la información, y, a su vez, tremendamente necesario para construir una sociedad sana y justa. Por tanto, debes tener esa vocación de servicio. Eso es lo fundamental. Y luego, mucha pasión ya que, sin ella, no se llega a ninguna parte. Por último, hay que considerar que será muy difícil. Pero si uno tiene claro su papel y su objetivo, no hay que dejarse desviar del camino. Lo recomiendo profundamente, creo que es un profesión muy necesario y animo a que se siga en él, pero sabiendo donde te metes”.

Realizada con la colaboración de Samuel López.

Licenciada en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid en 1986, su trayectoria profesional siempre ha estado ligada al mundo deportivo. ¿Por qué eligió este camino? “Desde pequeña, siempre me aficionó el deporte. Me gustaba y me gusta practicarlo. Mis compañeros de promoción, Vicente Vallés o Fran Llorente, tuvieron claro desde el primer día de carrera que querían dedicarse a la política. Yo, por el contrario, siempre quise deporte. Paco Lobatón, cuando dejó de presentar el telediario, hizo un programa sobre el Parlamento y me quiso llevar, pero me negué. ¿Qué hacía hablando de política? Yo sabía lo que quería».

Su voz inconfundible destaca en las narraciones de campeonatos de gimnasia rítmica, patinaje artístico o hípica. ¿Es satisfactorio este reconocimiento por parte del público? “La gente me conoce más bien por la voz que por la cara. Me encuentro muy bien haciendo lo que hago, me documento, trabajo duro para hacer las cosas de manera correcta. El que piense que al terminar la carrera deja de estudiar está muy equivocado. Hay que continuar con el aprendizaje. Te tiene que diferenciar del resto tu preparación y, para ello, tienes que darle tiempo; tienes que especializarte. Luego, debes intentar llegar al público. Yo, por ejemplo, lo que hago es contarle a la gente las cosas utilizando un lenguaje accesible a ellos, teniendo en cuenta que los deportes que yo transmito son muy técnicos”.

Su experiencia en la cobertura de los Juegos Olímpicos es muy distendida. ¿Cómo calificaría un despliegue informativo de estas características?  “Es brutal. Unos JJ. OO. empiezan a prepararse dos años antes de que se disputen. Ahora mismo, en 2018, estarán empezando a prepararse los de 2020 de Tokio. Todas las televisiones deben prepararlo a la vez con el comité organizador y con la empresa que organiza toda la señal televisiva y esto avanza en silencio, es invisible. La gente ve las Olimpiadas y ve a los periodistas allí, pero no sabe todo el trabajo que hay detrás”.

«No estaré en los próximos Juegos Olímpicos de Tokio 2020»

Ha estado presente en la cobertura de los Juegos Olímpicos de Verano de manera ininterrumpida desde Seúl 1988 hasta Río 2016. ¿Repetirá en los próximos? “No. Esto se debe a que los derechos de las Olimpiadas los ha comprado Eurosport para las ediciones de 2018, 2020, 2022 y 2024. Salvo que TVE negocie con el canal una sublicencia o una compra, no creo que participe. Creo que los de Río fueron mis últimos Juegos».

¿Guarda con especial apego la locución de alguna competición? “Todas en las que hay medallas de deportistas españoles tienen un punto de emoción, no solo por el hecho de ser los que nos representan, también porque te das cuenta de que eres tú la que lo va a contar. Esto tienen un plus de intensidad”.

¿Cree que el papel de la mujer está infravalorado en los medios de comunicación y en el deporte? «Es algo por lo que llevo luchando desde el metro cuadrado que me ha tocado en esta sociedad. No solo las deportistas tienen que tener su espacio. Las mujeres somos el 50 % de la población y debemos tener la posibilidad de demostrar la valía, preparación y formación que tenemos. Se debe reconocer que estamos tan capacitadas como los hombres para ocupar los puestos de gestión”.

«Las mujeres somos el 50 % de la población y debemos tener la posibilidad de mostrar nuestra valía»

¿Cuál es su postura con respecto a las reivindicaciones de los “Viernes Negros” del personal de Radio Televisión Española? “Allí he estado, me he hecho mi foto de negro todos los viernes. Llevo 32 años en RTVE y he visto pasar por allí a 14 directores generales y 14 de televisión. No hay nada que sea perfecto, pero el equilibrio en la información y en la manera de contar las noticias tiene que ser imprescindible en la televisión pública. En los últimos años, sinceramente, creo que no ha sido así. Se ha hablado más de entretenimiento en los telediarios que de la propia información y eso es otra manera de desinformar. La televisión pública es un caramelo muy apetitoso para todos los gobiernos”.

¿Qué le ha parecido su experiencia en la Universidad de Verano de Adeje? “Excelente. El concejal de deportes, Adolfo Alonso, me propuso hacer la ponencia inaugural y la hice. Fue un honor estar aquí abriendo los cursos de verano y luego participando en este curso de periodismo deportivo”.

Entrevista realizada junto a Sara Toj.

Los principales objetivos de esta iniciativa son: fomentar la realización audiovisual de todas las propuestas, centradas en temas educativos, además de fomentar la creatividad de los estudiantes y facilitar al profesorado materiales que puedan ser utilizadoss en sus actividades docentes cotidianas.

El plazo estará abierto hasta el próximo 20 de noviembre y podrá participar cualquier universitario del ámbito español que esté inscrito en algún curso o programa académico en 2017. La grabación debe subirse a la plataforma Youtube y, tras esto, registrarse en la página. Cabe la posibilidad de participar con dos vídeos como máximo.

En cuanto al contenido, no se aceptarán cortos con contenidos que muestren violencia, vulgaridad o lenguaje difamatorio. Tampoco los que contengan publicidad o logotipos, ya que debe ser una cita que pueda ser difundida en las aulas. Por otro lado, sí puede incluir música con copyright, pero si es así, debe ser indicado.

El premio será la emisión en TVE, pudiendo acudir los productores para presentar el trabajo realizado, la selección de los educlips correrá a cargo de la valoración y votaciones tanto de un jurado profesional como de un jurado popular. El jurado profesional está formado por docentes representantes de las diferentes universidades españolas que participan en el concurso.

El corto está protagonizado por el actor cubano Harlys Becerra, conocido por su interpretación desde muy joven en la gran pantalla y por su papel en ‘Vis a Vis’, serie española producida por Globomedia. La actriz Elena Furiase, que empezó en el mundo de la televisión en la serie “El Internado”, también protagoniza el reparto. Y aunque aún está por confirmar, se prevé que la realización abarque grandes sorpresas.

La Universidad de Sevilla (US) cederá el espacio de la facultad de Ciencias de la Educación para el rodaje de algunas escenas de la producción en las que varios alumnos de diferentes carreras participarán. Además, el cortometraje cuenta con valores que pretenden influir en la sociedad y se desarrollará en varios idiomas para servir como material audiovisual para profesores.

El producto finalizado podrá ser visto en festivales de cine y se intentará emitir en televisión. En el rodaje se utilizarán lugares conocidos de la ciudad de Sevilla como la Plaza de la Giralda, que durante unos días será el escenario de un corto que promete llamar la atención de lo que le puede ocurrir en el día a día.