Bajo el lema Violencia 0, ¿se puede erradicar la violencia machista?, Radio Ecca organizó el pasado martes, 7 de marzo, un Foro Digital sobre la Violencia de Género. La actividad pertenece al proyecto Sensibilización para la Erradicación de la Violencia de Género creado por la Fundación Ecca e implementado en todos los lugares donde operan, como en Tenerife. El foro nacional se convirtió en un espacio de análisis del tema a tratar y se realizó a través de la plataforma Zoom.
El evento constó de dos partes. Durante la primera de ellas se proyectó un resumen de la entrevista realizada a Victoria Rosell, delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, mientras que la segunda giró en torno al análisis, por parte de un panel de expertas en la materia, sobre los temas propuestos como la perspectiva de género o la violencia machista en la juventud.
Para dar comienzo al encuentro, Victoria Rosell trasladó su preocupación por las mujeres víctimas de violencia de género y la necesidad de hacer reflexionar a los hombres que ejercen este tipo de violencia, a través de una entrevista grabada a principios de este mes, puesto que por temas de agenda no pudo asistir al encuentro. «No es necesario que exista violencia física para que haya violencia sexual», declaró la delegada del Gobierno.
«Primero la víctima y después la denuncia»
Rosell centró su intervención en el cambio de paradigma que supone pasar del no es no al sí es sí porque «si no tienes mi sí no puedes tener una relación sexual». Esta Ley de Garantías de Libertad Sexual, Ley del Solo Sí es Sí, trae consigo, dijo, avances debido a que, al ser una ley integral, «pretende garantizar la atención y protección de las víctimas de una manera efectiva». Con este cambio, añadió, «el Gobierno procurará que el Estado sea capaz de reconocer a una víctima, ofrecerle un yo sí te creo, recoger muestras y guardarlas para el momento en el que la persona afectada se encuentre preparada a denunciar, proporcionándoles así un resguardo».
La delegada del Gobierno recalcó que el proceso debe ser «primero la víctima y después la denuncia» y que a finales de este año prevén que estén abiertos distintos centros de crisis para poder atender a todas las víctimas, ofreciéndoles ayuda psicológica y jurídica, entre otras. «El machismo es un virus de transmisión social», agregó.
Juan Carlos Atta, moderador del encuentro, concluyó la entrevista preguntando si la violencia de género se puede llegar a erradicar, a lo que Victoria Rosell respondió que «es muy difícil porque habría que acabar con cada desigualdad, con cada hombre que cree que es dueño de una mujer».
«Hay que educarnos como iguales»
En la segunda parte del evento, Atta comenzó con el debate donde se trataron temas como la perspectiva de género y la violencia machista en la juventud. Las participantes del coloquio fueron: María Antonia Caro, educadora social y experta en violencia machista; Priscila Retamozo, politóloga con un máster en igualdad de género; Beatriz Martínez, psicóloga y agente de igualdad experta en recuperación integral de víctimas de violencia de género; María Meneses, trabajadora social, y Esmeralda Hernández, orientadora sociolaboral, ambas participantes del proyecto Mujer Avanza de la Fundación Ecca.
Para encarar la recta final del encuentro, las ponentes centraron sus intervenciones en los retos pendientes que existen en la sociedad respecto a la violencia de género. En este sentido, María Antonia Caro puso énfasis en la escasez de soluciones que existen «para las necesidades que tenemos». Para lo que la experta propuso distintas medidas para intentar llegar a la violencia 0 como: la educación, la reeducación de los agresores, la prevención y las medidas psicosociales para las víctimas.
«La violencia sexual es algo en lo que hay que trabajar, aunque ya lleguemos tarde a ello»
En esta línea, Priscila Retamozo centró la atención en la necesidad de educar afectivo sexualmente a la juventud, puesto que «la violencia sexual es algo en lo que hay que trabajar, aunque ya lleguemos tarde a ello». Por su parte, Beatriz Martínez analizó la evolución de los casos de violencia machista durante los últimos veinte años y explicó que, aunque en el año 2004 se produjo un avance inicial, «la sensación es que ha ocurrido una curva de Gauss y ha disminuido la violencia machista». Asimismo, trató la violencia vicaria y destacó que «hemos dado pasos hacia adelante en este tema porque antes ni siquiera existía este concepto».
Para concluir con su intervención, Martínez destacó que las personas «hay que educarlas como iguales». Sin embargo, confesó tener plena confianza en las nuevas generaciones y en su educación respecto a estos asuntos. Por último, María Meneses y Esmeralda Hernández insistieron en la importancia de poner el foco en la víctima y en la educación. «Se ha avanzado, pero queda mucho por hacer», sentenció.
